Cerrar

De cerca

La séptima no es la última

Xabier Larrazabal | EITB

Este fin de semana se celebra en Donostia la séptima edición del festival Olatu Talka bajo el lema Hacer ciudad

Teniendo en cuenta que Olatu Talka se empezó a celebrar cuando Donostia todavía era candidata a ser la capital europea de la cultura, se podía haber entendido como un calentamiento antes del 2016. Pero en el año en el que el festival y la capitalidad al fin coinciden, los organizadores han anunciado que nada termina con esta edición: “Es algo que ya está muy arraigado en la ciudad, eso es lo que se entiende viendo todas las propuestas recibidas, y creo que los donostiarras no perdonarían que en el 2017 no hubiese festival”, dice el director de Olatu talka Jon Aizpurua. Es un festival cuyo programa se llena con propuestas hechas por los ciudadanos y asociaciones de Donostia, y este año se han organizado 200 actividades por toda la ciudad, del viernes al domingo.

Hacer ciudad es el lema que han escogido para este año y el miembro del programa  cultural de Donostia 2016 Iker Tolosa cree que refleja bien la su evolución: “en las primeras ediciones el festival se limitaba a la expresión artística pero con el tiempo hemos visto que Olatu Talka es un instrumento importante para influir en la ciudad”. Las intervenciones que se harán en 6 de los 40 puntos críticos de Donostia están relacionadas con esa idea. En esos puntos se pintarán murales, se realizarán instalaciones de luz y de sonido e incluso se harán actividades científicas “con el objetivo de que los vecinos hagan suyos esos espacios, para que dejen de ser lugares abandonados y pasen aser espacios utilizables”, explica  Jon Aizpurua.

El Olatu Talka de 2016 lo abrirá el Big Dance que tendrá lugar el viernes delante del Kursaal. Es una iniciativa que pone a bailar a la vez la misma coreografía a miles de bailarines de 50 países , y el turno de Donostia será a las 13:00. Una vez abierta la programación, vendrán por ejemplo, el Kontxa Gau Market, mercadillo con 40 puestos en los bajos de la Concha que el sábado estará abierto hasta medianoche, o los 60 conciertos de música organizados dentro de la iniciativa Kontzertour.

El festival se cerrará con el slow festival que tendrá lugar el domingo durante todo el día en el paseo de la Concha, festival que se une a la filosofía que plantea vivir la vida más relajadamente. Con una programación que incluye música de harpa, sopranos, puestos de productos locales o partidas de ajedrez, el slow festival cerrará el paseo a los cohes y cubrirá el asfalto con hierba artificial.

Más información (1)