Documental 'Sagarra jo'
La cultura vasca se abre al mundo, pero... ¿cómo?
Natxo Velez | eitb.com
Los cineastas Iban Rusiñol y Nicolas Novion proponen una reflexión sobre las relaciones entre las pequeñas culturas y las macroculturas, motivada por la colaboración entre el trío Kalakan y Madonna.
"¿Qué encontró Madonna en el trío Kalakan, cuando lo descubrió a través de las hermanas Labeque? ¿Se ha servido de estos tres artesanos musicales como simple pincelada estética de su mastodóntico espectáculo o, por el contrario, se ha afanado en tratar de armar un profundo discurso sobre el multiculturalismo y la tolerancia?". Esa pregunta y las ganas de analizar el papel de las culturas minoritarias en la época de la(s) macrocultura(s) fueron los gérmenes del documental "Sagarra jo".
Esa reflexión encendió la chispa para que Iban Rusiñol y Nicolas Novion se embarcaran en un largo camino en el que han escudriñado todo lo relativo a esta colaboración sin precedentes. Han trazado un viaje partiendo de las interrogantes presentadas por la aventura musical de Madonna y Kalakan, en busca de la respuesta o, quizás, las respuestas.
A día de hoy, los cineastas se encuentran en pleno proceso de producción del documental "Sagarra Jo". Convencido de que no podían dejar pasar la oportunidad de documentar tamaño fenómeno, el dúo comenzó su singladura tras los pasos de la mediática artista y los músicos de Kalakan en agosto de 2012, sin permisos de ningún tipo para grabar pero con la ilusión por bandera.
La fe, en parte gracias a empujoncitos de los miembros de Kalakan y la propia Madonna en forma de intercesiones de cara a los managers, movió montañas una vez más, y los cineastas consiguieron poder grabar, entre grandes medidas de seguridad, imágenes de las actuaciones y todos sus alrededores.
Ahora, se hallan en la fase en la que dar forma a todas esas reflexiones, en la que llevar todos sus pensamientos al formato audiovisual, y han optado por buscar ayuda financiera en la suscripción popular a su proyecto, de manera que puedan asegurarse que el documental va a salir adelante.
Todos los pasos dados hasta ahora en este camino están recogidos en el adelanto "Sagarra bildu", reclamo que nos ha llevado hasta Iban para saber más sobre el proyecto.
¿Qué os empuja a crear "Sagarra jo? ¿Cuál es su leitmotiv?
Iparralde es un sitio muy pequeño, y todos nos conocemos entre nosotros. Conocíamos a los chicos de Kalakan, y un día nos pidieron, muy discretamente, que les grabáramos tres vídeos pero que no nos podía decir para quién eran. Más tarde, una vez expiró la cláusula de confidencialidad, ya nos pudieron revelar que esos vídeos eran para los directores artísticos que trabajan con Maddona, momento en el que a nosotros se nos ocurrió que eso había que contarlo, fuera como fuera.
Recogimos nuestros bártulos y, mientras discutíamos con los managers, pudimos estar una semana tras ellos, el verano de 2012, en el tramo de la gira que los llevó de Niza a Zurich. Gracias a la mediación de Kalakan y Madonna, las negociaciones dieron su fruto y pudimos, finalmente, grabar.
Poder ver esta tan particular historia de cerca, comprobar la magnitud del choque entre un elemento de la macroindustria y unos artesanos musicales, gestó una reflexión que nos lleva a querer comprobar qué nos relata esta colaboración.
¿Qué buscaba Madonna en el trío Kalakan?
Nosotros tenemos varias hipótesis y lo hemos hablado con los miembros de Kalakan. Buscaba algo especial, y ahora queremos investigar un poco sobre ello: hablar con las hermanas Labeque, que fueron quienes pusieron en contacto a Madonna con Kalakan, realizar algunas entrevistas más... Por eso estamos llevando a cabo esta campaña de micromecenazgo para ahondar tanto en la documentación como en el contexto estético de la obra.
¿Qué vía les queda a las culturas más pequeñas ante las macroculturas?
Los vascos siempre tenemos que ofrecer mil y una explicaciones cada vez que salimos fuera: explicamos por qué hablamos euskera, tenemos que aclarar que tener otra lengua es enriquecedor...
Madonna también explicaba eso en sus actuaciones, cuando tocaba "Sagarra jo", porque ella había dotado a la canción de su propio significado, que giraba en torno a la tolerancia, la mezcla de culturas...
Pero en el documental queremos dejar meridianamente clara una cosa: modernizar las cosas de cualquier manera, mezclar todos los colores, puede acarrear el riesgo de que todo quede gris, de perder la especifidad de cada uno.
En "Sagarra jo", queremos proponer un análisis de esos dos discursos.
¿Cómo os las ingeniasteis para poder grabar dentro de una gira de las dimensiones de las de Madonna con las restricciones que eso acarrea? ¿Os dieron facilidades?
Negociar con los americanos es complicado, y con el manager resultó ser así. De todas maneras, Niza no está tan lejos para nosotros: por eso fuimos allí. Aún así, como pudimos comprobar al llegar, las gestiones realizadas por el trío Kalakan y la propia Madonna fueron vitales para que pudiéramos trabajar.
Para realizar el teaser "Sagarra bildu", habéis contactado con Berri Txarrak, Jon Maya y Asier Altuna. ¿Por qué los habéis elegido a ellos?
Teníamos una lista con más nombres, pero el dinero nos ha bloqueado.
En primer lugar, elegimos a Jon Maya. Cuando vimos a Kalakan actuar junto a Madonna, pensamos enseguida en él por los trajes, los dantzaris... Y no nos equivocamos, pues los propios Kalakan nos han dicho más tarde que enseñaron vídeos de Jon Maya a Madonna, durante el proceso de documentación. Es por eso que necesitábamos su testimonio.
A Berri Txarrak los llamamos porque son un icono que exporta su trabajo con un planteamiento moderno. Cantan en euskera y tocan mucho en el extranjero, pero no ofrecen folclore, sino música moderna.
Por su parte, también requerimos la presencia de Asier Altuna en su calidad de director de cine, pues, al ser la expresión cultura más cara, el cine que se realiza en un territorio es un buen indicador del estado de la cultura en dicho lugar. Si consiguiéramos facturar cine comercial en euskera, sería señal de que no estamos tan mal.
La película también tendrá partes de ficción. ¿Qué historia contará?
Queremos hacer un documental, no un reportaje, y para ello nuestra intención es utilizar un lenguaje cinematográfico. Ese esteticismo nos ayudará a articular la película.
Vamos a relacionar "Sagarra jo" y la interpretación que Madonna hace de esa canción con el proceso de obtención de sidra: la txalaparta y el ciclo en el que se machaca la manzana contra madera... Propondremos un paralelismo entre los ciclos de obtención de la bebida y las etapas de nuestro trabajo y el proyecto de la cantante.
¿Cuál es el objetivo de la campaña de financiación?
Barajamos dos escenarios. Si todo saliera bien y recibiéramos financiación de alguna televisión francesa, todo sería más fácil, pero una película no puede depender solo del dinero público y nosotros también tendremos que aportar nuestra parte; para eso nace la campaña. Por otro lado, en el caso de que todo no fuera tan bien, podríamos costear la producción con el dinero de la campaña de crowdfuing. Aún así, lo que está claro es que de una manera u otra, no podríamos terminar la película sin la campaña de financiación compartida, pues hay muchas cosas que solo se desbloquean a través del dinero: derechos artísticos de las imágenes y sonidos grabados por nosotros, abogados...
¿Qué le queda por delante a "Sagarra jo"?
Antes que nada, tenemos que filmar todo lo que nos falta, y eso podría ser un 70 % del trabajo final. Si todo va bien, comenzaremos en octubre o noviembre de 2014, con la cosecha de las manzanas. Si no tuviéramos tiempo de estar preparados para entonces, tendríamos que dejarlo para invierno de 2015.
Todo eso será lo que nos marque cuando estará la película, pues una vez acabados esos trabajos necesitaremos cuatro o cinco meses de posproducción. Por tanto, siendo optimistas, podemos decir que pudiera estar para mediados de 2015, y, si no, para mediados o finales de 2016.