Belako, en Berlín: concierto ruidoso, concierto perfecto

15 de Julio 2016. Berlín

Saliendo por los pelos del tren, vemos a Galder y Lena, dos de los culpables de que toquemos en Rote Insel y unos anfitriones inmejorables. Galder nos lleva a su casa en Sonnenallee, dejamos los instrumentos y vamos a comer al Shaan, un indio delicioso y barato, donde divagamos sobre temas de vital importancia como la inmortalidad de Gandalf, el museo de Harry Potter o los amigos que nos hemos hecho en el metro que iban a participar en el ?campeonato internacional de Yugi?(Oh).

Petados de comida (como cada vez que salimos de un restaurante, no se contempla otra opción), nos echamos una siesta exprés, ducha y vamos al lío.

Nos cuentan que Rote Insel, ?Isla Roja?, debe su nombre a su resistencia ideológica durante la caída del muro de Berlin. El sitio es brutal, a caballo entre un gaztetxe (por algunas pintadas, la música y quienes lo llevan) y una casa okupa germana.

Nos acogen con cervezas Flensburger Pilsener y 1312 (ACAB), pizzas caseras y mucho ambiente. No se oyen las teclas, y no hay monitores por lo que Cris se pasa más de la mitad del bolo gritando desde abajo y saltando. Se monta un buen fiestón, concierto ruidoso y sucio, no se distingue una mierda pero es perfecto en ese momento y en ese lugar.

Hay una hoguera fuera, suenan éxitos de ayer y de hoy como ?Loretxoa? de Exkixu. Tras unas cuantas birras nos entra el hambre otra vez y vamos a comer unos curry wursts; ante el pajarón, no hay nada mejor.

El resto del fin de semana queda codificado, tendréis que suscribiros al canal de pago. Unas pequeñas pistas: Syndicat. Clash. Bicis. Tiergarten. Tempelhoff. Segunda mejor hamburguesa de Berlin, Don Carlos. Sweet kartoffel. Aniversario del Soulcat. Chupitos mexicanos. Sisyphos. Muerte y destrucción. Mercadillo en Mauerpark. Tacatún.