Milán-San Remo
Los esprínteres buscan su Monumento más accesible
Redacción
La supresión de las subidas a Le Manie y la Pompeiana abre las puertas a los más rápidos del pelotón. Cavendish y Greipel se han apuntado a última hora.
Este domingo llega la Milán-San Remo, el primer Monumento Ciclista de la temporada. Es, sin duda, el Monumento más indicado para la disputa en el sprint final. Por eso, los esprínteres atacan especialmente esta clásica, entre las cinco más importantes del calendario.
Este año, además, la organización ha suprimido la subida a Le Manie del recorrido, una de las dificultades del comienzo, que ahora los más rápidos no tendrán que superar. Por otra parte, la Pompeiana tampoco estará incluida en el perfil de la Milán-San Remo, por las malas previsiones meteorológicas en lo alto del puerto. Cipressa (5,65km al 4,1%) y Poggio di Sanremo (3,7km al 3,7%) serán las pruebas finales, camino a San Remo, poco antes de la línea de meta. En 2007, con un recorrido similar al de este año, fue Óscar Freire el vencedor.
Mark Cavendish y André Greipel, los hombres más rápidos del pelotón, se han animado a participar tras el cambio de recorrido. El británico busca su segunda Milán-San Remo. Otros esprínteres, como Peter Sagan, Tom Boonen, Sacha Modolo, John Degenkolb o Arnaud Démare, ya habían confirmado su presencia en la carrera, y ahora se ven aún más favorecidos.