La marea naranja no falla en la cita pirenaica

Los aficionados vascos no han querido perderse la etapa reina del Tour de Francia y han cubierto de naranja los alrededores del Tourmalet. Los incondicionales aficionados han llegado de todos los rincones de Euskal Herria.

Muchos de los congregados pasarán en los Pirineos unos tres días por lo que han viajado bien pertrechados con comida y bebida.

Entre los muchos aficionados vascos, algunas caras conocidas, como el pelotari Patxi Ruiz, que recién operado aprovecha para pasar unos días en la montaña.

Así, los Pirineos han cambiado su aspecto habitual, las ikurriñas y el color naranja cubren las rampas de los puertos y la montaña es una auténtica fiesta.