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Copa del Rey

El Athletic no puede con los armeros

Redacción

El Eibar tuvo un par de ocasiones claras en el primer tiempo, pero no las aprovechó. El equipo armero pagó el esfuerzo en la segunda parte, pero los rojiblancos han estado romos en ataque.

Ander Herrera pugna con un jugador del Eibar. EFE

Ficha técnica:

SD Eibar: Xabi Irureta; Aimar, Arregi, Raúl Navas, Bingen; Errasti, Abaroa; Capa, Mainz (Aketxe, min.75), Del Olmo (Arroyo, min.55); y Arruabarrena (Jiménez, min.58).

Athletic Club: Raúl; Iraola, San José, Amorebieta, Aurtenetxe; Iturraspe; Susaeta, Toquero (De Marcos, 46), Herrera, Ibai Gómez (Muniain, min.46); y Llorente (Aduriz, min.72).

El Athletic ha empatado en Ipurua frente al Eibar (0-0), en el partido de ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. El Athletic ha estado desaparecido en la primera mitad y ha podido irse en desventaja al descanso. El Eibar ha pagado el esfuerzo del primer tiempo y los rojiblancos se han adueñado del balón en el segundo periodo, pero sin crear apenas peligro.

La primera parte ha resultado muy equilibrada, pero las mejores ocasiones las ha tenido el Eibar. El Athletic no ha hilado ninguna jugada en ataque y no disparado entre los tres palos en los primeros 45 minutos.

Un disparo de Mainz en el minuto 24 ha sido la primera oportunidad clara del encuentro. Raúl ha tenido que emplearse a fondo y ha hecho una excepcional parada que ha evitado el primer gol armero.

Los armeros han seguido empujando mediante saques de esquina y jugadas a balón parado. El Athletic inoperante en ataque ha intentado contrarrestar el empuje local con la posesión del balón, pero poco más.

En la última jugada antes del descanso Joseba del Olmo ha tenido la mejor oportunidad de la primera parte, pero solo en el segundo palo no ha acertado al definir.

El descanso fue para el Athletic como el gong salva a un boxeador al borde del k.o. al final de un asalto. Tal era el estropicio que estaba sufriendo su equipo, que el rosarino, en su línea de no esperar demasiado con los cambios, metió a De Marcos y Muniain al campo a la vuelta de vestuarios.

No mejoró mucho de inicio el equipo bilbaíno, pero si más tarde, a medida que iba transcurriendo el choque y el Eibar iba cediendo frescura en lo físico.

Sin embargo, el Eibar, muy cansado, aguantó del marcador y el Athletic, aunque fue encontrando espacios, estuvo demasiado espeso como para impedir el 0-0 final.


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