Análisis
Washington mira más al Pacífico que al Atlántico
Jesús Torquemada
Obama no va a venir a la cumbre con la UE, pero en cambio si irá a dos países del Pacífico, Indonesia y Australia, ya que EE. UU. está dando prioridad a los países de esa zona.
El eje del mundo se ha desplazado del Atlántico al Pacífico. La noticia de que Obama no asistirá en persona a la cumbre entre la Unión Europea y Estados Unidos así lo confirma.
Durante todo el siglo XX, el peso político y económico del mundo estaba en ambas orillas del Atlántico y la relación entre Estados Unidos y Europa era fundamental. Ahora, y desde hace ya algunos años, ese centro de gravedad se ha desplazado al Pacífico.
Obama no va a venir a Europa, pero sí va a ir a dos países del Pacífico: Indonesia y Australia (aunque en el caso de Indonesia se explica también por razones afectivas, pues Obama vivió en ese país cuatro años cuando era un chaval).
Estados Unidos está dando prioridad ahora a sus relaciones con países del Pacífico, y sobre todo con China. Unas relaciones que no son precisamente fáciles. China acaba de protestar enérgicamente por la venta de armas estadounidenses a Taiwán, la isla china rebelde, y ha avisado de que, si Obama recibe al Dalai Lama próximamente, habrá consecuencias.
El año pasado, precisamente para no provocar a China, Obama no se entrevistó con el Dalai Lama cuando éste viajó a Estados Unidos. Pero, en su próximo viaje, ¿cómo podría negarse un Nobel de la Paz a recibir a otro Nobel de la Paz?
A pesar de todo, las relaciones económicas entre China y Estados Unidos son tan importantes para los dos que no pueden permitirse el lujo de enfadarse del todo.
Y en algunos temas se entienden muy bien, como en la reciente Cumbre del Clima de Copenhague, donde dejaron de lado a la Unión Europea, partidaria de más recortes de gases, y se pusieron de acuerdo para seguir contaminando.
Esa cumbre fue una demostración de que la Unión Europea está perdiendo peso relativo en el mundo y la ausencia de Obama en la cumbre trasatlántica lo confirmará aún más.