Trump quiere más a los israelíes que a los europeos

Bueno, pues ahora ya está claro lo poco que Trump nos quiere a los europeos. Tenía que elegir entre sus amigos de Oriente Medio, que son Israel y Arabia Saudí, y sus amigos europeos, que son Reino Unido, Alemania y Francia. Estos tres firmaron, junto a Estados Unidos, Rusia y China, el pacto por el que Irán renunciaba a fabricar armas nucleares a cambio de que se le quitasen las sanciones económicas.

Londres, París y Berlín creen que Irán está respetando el acuerdo y que no hay motivo para romperlo. Pero Trump ha hecho más caso a Arabia Saudí y a Israel. Los dos son enemigos de Irán y están preocupados porque Irán participa en las guerras de Siria y de Yemen y, además, está ganándolas. Los dos quieren pararle los pies a Irán y para eso es necesario bloquear la economía iraní.

En teoría, los otros países firmantes podrían seguir comerciando con Irán; pero Trump ha prometido castigar a las empresas extranjeras que hagan negocios con Irán. Teniendo en cuenta que muchas de esas empresas también hacen negocios con Estados Unidos y dependen además de bancos estadounidenses, Trump puede ejecutar esa amenaza. Hace tres años, cuando se firmó el pacto, se dijo que era fundamental para mantener la paz en Oriente Medio. Por tanto, la ruptura del pacto aumenta el riesgo de más guerras en Oriente Medio.