El Gobierno
Promoverán el arbitraje para los clientes de preferentes de Bankia
Redacción
Se aplicará en los casos "más flagrantes" en los que pueda haber habido "mala praxis". De Guindos ha explicado que el arbitraje operará a través de la colaboración de entidades de consumo autonómicas.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha anunciado en el Congreso la intención del Gobierno de articular un procedimiento de arbitraje para los tenedores depreferentes y deuda subordinada de Bankia.
El arbitraje, ha explicado el ministro en su comparecencia en la Comisión de Economía, se aplicará en los casos "más flagrantes" en los que pueda haber habido "mala praxis" en la comercialización o "circunstancias personales en las que el consumidor no estaba en condición de entender el producto".
Novagalicia y CatalunyaBanc ya han recurrido al arbitraje para abrir la posibilidad de que algunos de sus clientes recuperen la mayor parte de su inversión posible y De Guindos ha dicho que el Gobierno es "consciente de la problemática" de las participaciones preferentes.
El titular de Economía ha recordado que de media los inversores de productos híbridos como las participaciones preferentes o la deuda subordinada de las entidades en manos del Estado recuperarán el 60% de su inversión, por encima que su valor de mercado.
No obstante, el arbitraje podría facilitar que algunos clientes recuperen una parte mayor de su inversión, una posibilidad que hasta ahora parecía cerrada por las condiciones impuestas por los socios europeos al conceder la ayuda a la banca española.
El ministro ha avanzado que se articularán procedimientos de arbitraje para los tenedores de híbridos de Bankia que "seguirán criterios de selección similares a los de Novogalicia Caixa y Catalunya Bank".
"Este procedimiento es rápido en su ejecución y tiene ventajas en los costes. Se operará con la colaboración de las autoridades de consumo autonómicas, que resolverán el arbitraje, aunque previamente un asesor privado filtrará en cada entidad los supuestos que evidencien una clara 'mala praxis'. Así, el cliente encontrará e proceso más sencillo y rápido para resolver el conflicto", ha añadido.