Primera vez en Euskadi
Bizkaia tendrá la primera autopista inteligente en 2023
EITB.EUS
Los vehículos que transiten por el tramo, de 57 kms, y dispongan de tecnología de recepción de datos, podrán acceder a información precisa y en tiempo real sobre diversas incidencias.
Euskaraz irakurri: Bizkaiak lehen autobide adimenduna izango du 2023an
El departamento de Infraestructuras y Desarrollo Territorial y Tecnalia han firmado un acuerdo de colaboración para implantar, por primera vez en Euskadi, un corredor cooperativo. El diputado Imanol Pradales y el presidente de Tecnalia, Alex Belaustegui, han presentado los detalles del convenio, que contempla una inversión de 3,5 millones de euros y prevé conectar digitalmente carreteras, vehículos y centros de control para el año 2023.
"El proyecto echará a andar en las primeras semanas de 2021. Y los 57 kilómetros de autopista que separan Ugaldebieta de Ermua se convertirán en 2023 en el primer tramo de autopista inteligente de Euskadi", ha asegurado Imanol Pradales, en alusión al tramo de autopista (AP8 y A8) que servirá de laboratorio tecnológico del proyecto.
Esos 57 kilómetros conformarán el primer corredor cooperativo. Un proyecto con una doble funcionalidad, ya que la red viaria del territorio servirá para atraer y probar proyectos de I+D aplicados a la movilidad en carretera y a las infraestructuras viarias. Y, por otra parte, esa tecnología se integrará en la gestión operativa de las carreteras que realiza la Diputación y dará un servicio práctico diario a las personas usuarias de la red viaria.
"Cemento y tecnología al servicio de una movilidad más segura y sostenible. Con este acuerdo, damos un salto cualitativo y preparamos las carreteras de Bizkaia para el futuro. Cada vez más vehículos incorporan tecnología para emitir y recibir datos, información. Y el futuro pasa porque sean los vehículos los que tomen decisiones y actúen en base a esa información que les llega desde los Centros de Control".
Sensorización de la red y aplicaciones prácticas
Para materializar este proyecto, van a instalarse inicialmente 50 balizas de comunicación cooperativa (Road Side Unit) a lo largo de los 57 kilómetros de autopista para recibir y emitir datos, información, entre los vehículos y los centros de control. Van a equiparse vehículos con tecnología cooperativa para los testeos, así como 5 cámaras inteligentes y 135 sensores.
En 2023, los vehículos que transiten por el corredor cooperativo y dispongan de tecnología de recepción de datos, van a poder tener información precisa y en tiempo real sobre muy diversas incidencias: meteorológicas, accidentes, obras, atascos, obstáculos en la calzada, límite de velocidad ubicación de riesgos y monitorización de señales.
Pradales y Belaustegui han definido los grandes beneficios que va a suponer este proyecto a diferentes niveles. Ya que, además de suponer una herramienta de gran utilidad para las y los conductores, también va a redundar en más seguridad en la movilidad del transporte por carretera y en una gestión más eficiente para los centros de control, que podrán anticipar posibles incidencias y tomar decisiones con más tiempo para prever todo tipo de situaciones.