Crisis en Ucrania
El G8 deja fuera a Rusia y organiza una cumbre para junio
Redacción
Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Italia, Alemania, Canadá, Japón y la UE han decidido intensificar la presión sobre Moscú por la anexión de Crimea.
Los jefes de Estado y de Gobierno del G7 (G8 sin Rusia) y los representantes de la Unión Europea (UE) han escenificado la ruptura del diálogo con Rusia y han intensificado la presión internacional sobre Moscú al decidir celebrar una cumbre en Bruselas en junio en lugar de la del G8 prevista ese mes en Rusia.
"Suspendemos nuestra participación en el G8 hasta que Rusia cambie el rumbo y las cosas vuelvan al punto en el que se pueda tener una discusión significativa. Nos reuniremos en junio de 2014 en Bruselas en el formato de G7", ha anunciado hoy ese grupo de países en la que llamaron "Declaración de La Haya".
"No participaremos en la prevista cumbre de Sochi" del 4 y 5 de junio en el formato G8, han decidido los líderes occidentales.
Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Italia, Alemania, Canadá y Japón, que integran el G7 o el club de los países más ricos y poderosos del mundo, se reunieron ayer en La Haya para decidir los siguientes pasos con los que intensificar la presión sobre Moscú por haberse anexionado la república autónoma ucraniana de Crimea.
En la reunión también participaron, en representación de la UE, los presidentes del Consejo y de la Comisión Europea (CE), Herman Van Rompuy y José Manuel Durao Barroso, respectivamente.
El G7, convocado por el presidente de EEUU, Barack Obama, en los márgenes de la Cumbre de Seguridad Nuclear, señaló que tendrán una amplia agenda que tratar en la reunión de junio, para la que no especificaron una fecha.
Rusia, por su parte, está acelerando la integración política, económica y militar de Crimea, donde ya ondea la bandera de ese país, se utiliza el rublo y se han entregado ya pasaportes rusos, mientras que Ucrania ha anunciado la retirada de sus tropas de esa península.