ANÁLISIS
El euroescepticismo y la crisis de refugiados, un aval para la derecha europea
Imanol Butron Alonso (*)
La crisis financiera, la crisis del euro y la crisis de refugiados han provocado un aumento de movimientos nacionalistas y populistas de extrema derecha.
Euskaraz irakurri: Euroeszeptizismoa eta errefuxiatuen krisia, europar eskuindarraren bermeak
Janez Jansa, líder del Partido Demócrata Esloveno y ex primer ministro del país, venció en las elecciones celebradas el pasado domingo con el 25 % de los votos.
Con esos resultados, la formación ha logrado llegar al poder del país balcánico, aunque para afianzarse necesitará alianzas de gobierno. Por lo tanto, el principal reto del partido será conseguir esos apoyos. La tarea se presenta complicada teniendo en cuenta la línea dura que maneja en materia de inmigración. La única formación que podría crear gobierno con Janez Jansa es la derechista Nueva Eslovenia, aunque su apoyo no sería suficiente para conseguir una mayoría parlamentaria.
Por su parte, en Italia, donde el nuevo Gobierno acaba de jurar sus cargos hace tan solo unos días, el recién nombrado ministro de Interior y líder de la Liga, Matteo Salvini, ha prometido acelerar las expulsiones de inmigrantes irregulares y ha criticado las políticas de asilo de la Unión Europea. Además, en los últimos días ha sido habitual escucharle hablar sobre la posibilidad de que Italia salga de la Unión Europea. De hecho, uno de los motivos de este tardío juramento de cargos ha sido que tanto el Movimiento 5 Estrellas como la Liga querían a Paolo Savona como ministro de Economía, cuya principal apuesta era sacar a Italia del euro.
Sin embargo, hace tiempo que esta tendencia antiinmigrante y euroescéptica dejó de ser una novedad en el viejo continente. Con un discurso parecido, son muchos los partidos que empiezan a acariciar el poder a través de coaliciones o con un número pequeño de parlamentarios, pero también los que ya gobiernan en solitario como en Polonia y Hungría donde los partidos Ley y Justicia (PiS) y Fidesz respectivamente han logrado ganar en las urnas.
Este ascenso comenzó principalmente por la crisis financiera global, la crisis del euro y la crisis de los refugiados. Además, según el politólogo Cas Mudde, el declive de los partidos tradicionales también ha influido mucho en este aumento porque eso ha hecho que el espacio político se haya fragmentado, abriendo así la puerta a partidos populistas que, aun sin ser mayoría, han ido ganado una influencia considerable.
Prueba de ello es que la media de votos recabada por estas formaciones en las consultas de los últimos años ha sido del 20 %. Un resultado sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial.
Alarma en la Unión Europea
Ante la crisis que atraviesa la Unión Europea, el Foro Cultural Europeo ha querido poner en marcha una iniciativa donde un grupo formado por expertos e intelectuales se ha reunido para analizar y elaborar estrategias de comunicación para la Unión Europea.
Durante 4 días y con la vista puesta en las elecciones europeas del año que viene, los debates llevados a cabo en Ámsterdam se han centrado sobre todo en buscar soluciones para combatir el aumento de movimientos nacionalistas y populistas de extrema derecha que amenazan la estabilidad europea. Según ellos, el vacío que deja la UE por sus problemas de comunicación es aprovechado por los populistas y nacionalistas para promover un discurso radical, y han afirmado que la manera en que los partidos políticos tradicionales aborden los problemas será determinante en el desarrollo de este fenómeno.
(*) Imanol Butron Alonso, graduado en Ciencias Políticas por la Universidad del País Vasco (UPV-EHU), es alumno en prácticas del Máster De Comunicación Multimedia EiTB-EHU en eitb.eus.