Secretos oficiales
Así son los plazos y pasos para desclasificar documentos oficiales en otros estados
Agencias | EITB Media
No hay unanimidad en cuanto al plazo a la hora de abrir al público los documentos oficiales: todo depende de la importancia que tengan para la seguridad del Estado.
Euskaraz irakurri: Agiri ofizialak desklasifikatzeko epeak eta pausoak beste estatu batzuetan
30 años en Alemania e Italia, 50 en Francia y hasta 75 en Estados Unidos. No hay unanimidad en cuanto al plazo a la hora de abrir al público los documentos oficiales: todo depende de la importancia que tengan para la seguridad del Estado.
Francia
La ley establece el derecho de los ciudadanos a acceder a los documentos administrativos, pero con restricciones para una amplia gama de casos: las deliberaciones del Consejo de Ministros, la defensa nacional, la política exterior, la seguridad del Estado y de las personas o la integridad de la moneda y del crédito público.
Estos documentos que pueden afectar a la defensa nacional se podrán divulgar al cabo de 50 años, salvo dos excepciones: cuando puedan afectar a la seguridad de las personas mencionadas o cuando puedan permitir concebir, fabricar, localizar o utilizar armas nucleares, químicas o biológicas.
Alemania
En Alemania, la ley establece un plazo de 30 años para la desclasificación de los secretos oficiales o material sensible, procedente preferentemente de los distintos departamentos del espionaje interior, exterior o militar.
Sin embargo, y de acuerdo con una reforma aprobada en 2017, estos mismos departamentos del espionaje -cuya coordinación depende directamente de Cancillería- pueden determinar que no se desclasifiquen, en virtud de una serie de excepciones.
Italia
La duración de los secretos oficiales es de 15 años, aunque cuando expira ese plazo de tiempo el Gobierno tiene 30 días para decidir si lo prorroga y, en caso afirmativo, extenderlo hasta los 30 años, tiempo que no puede ser superado.
El secreto oficial siempre debe ser motivado por el primer ministro en una sesión restringida ante el Comité para la Seguridad de la República, una comisión parlamentaria que regula la actividad de los servicios secretos.
Reino Unido
En el Reino Unido, la Ley de Secretos Oficiales tiene como objetivo evitar la filtración de información sensible del Gobierno y evitar actos de espionaje. A esta ley se deben todos los funcionarios del Gobierno, los empleados que trabajan en servicios de seguridad, jueces, policías, miembros de las fuerzas armadas o los que tienen algún contrato con el Ejecutivo.
Los documentos sensibles del Gobierno solo pueden hacerse públicos después de 30 años, pero podría extenderse el plazo si las autoridades juzgan que su divulgación puede perjudicar la imagen del país, la seguridad nacional o las relaciones exteriores.
Estados Unidos
Estados Unidos no cuenta con una Ley de Secretos Oficiales y la revelación de información clasificada por lo general no es ilegal, pero hay varias leyes que protegen la información secreta que castigan la divulgación de secretos relacionados con la defensa y sólo los tribunales pueden determinar si una información compromete la seguridad nacional.
El gobierno estadounidense tiene tres niveles de clasificación de la información: confidencial, secreta y de alto secreto, y según un decreto de 2009, su desclasificación se produce automáticamente a los 25 años.
Pero hay información que puede seguir siendo sensible y suponer una amenaza para la seguridad nacional, y en estos casos la revisión de su publicación, total o parcial, se prolonga hasta los 50 años.
Pero aún hay información muy comprometida, como la identidad de un agente o el diseño de un arma de destrucción masiva, que puede mantener clasificado un documento hasta los 75 años. Más allá, se requiere un permiso especial.
Bélgica
Una ley de 1998 creó en Bélgica un marco general para proteger la confidencialidad de documentos sensibles y principalmente fijó fuertes sanciones en caso de difusión no autorizada, pero no incluyó un procedimiento para desclasificar.
Los partidos ecologistas Ecolo y Groen han propuesto un proyecto de ley, respaldado por la coalición de Gobierno, que propone que un documento pueda hacerse público en un periodo de 20, 30 o 50 años en función de si es considerado confidencial, secreto o muy secreto, los tres niveles utilizados por Defensa o Asuntos Exteriores.
Para desclasificar será necesario un aval explícito de la autoridad concernida, que deberá tomar una decisión seis meses antes del fin del plazo y que podría solicitar prolongaciones de diez en diez años en un procedimiento controlado por el Parlamento federal. El periodo total no puede superar los 100 años.