Crímenes del franquismo
Víctimas del franquismo declaran dentro de la querella argentina
agencias | redacción
Un familiar del sacerdote José Ariztimuño, asesinado sin juicio alguno, y Pedro Estonba, torturado en comisaría en 1971, declaran este miércoles en los juzgados de Donostia-San Sebastián.
Aitzol Azpiroz, sobrino biznieto del sacerdote José Ariztimuño, y Pedro Estonba, como víctima de torturas en la Comisaría de Donostia-San Sebastián en el año 1971, prestarán declaración este miércoles en los juzgados de la capital guipuzcoana dentro de la querella argentina contra los crímenes del franquismo.
Se trata de la primera vez que se recogen declaraciones ante la Justicia española en respuesta a sendos exhortos dirigidos por la jueza María Servini.
Representantes de la plataforma vasca para la querella contra los crímenes del franquismo han ofrecido una rueda de prensa en Donostia-San Sebastián, en la que han llamado a la ciudadanía a que participe en la concentración de solidaridad que se celebrará ante los juzgados a partir de las 12:00 horas, con motivo de la citada declaración.
El portavoz de la plataforma vasca, Josu Ibargutxi, ha recordado que "hay cientos de querellantes que esperan su turno para declarar por primera vez en juzgados españoles", y ha destacado que, "pese a las muchas trabas del Gobierno español, este miércoles declararán "Pedro Estonba por torturas, que junto con la cárcel constituyeron práctica habitual en los 40 años de dictadura".
Torturas y asesinatos
El propio Estonba ha relatado que en 1971, cuando contaba con 21 años, fue detenido por varios policías en plena calle cuando se había declarado estado de excepción. De este modo, ha explicado que fue torturado durante casi los 16 días que permaneció en la comisaría de Amara y que posteriormente fue encarcelado en la prisión de Martutene.
Asimismo, ha señalado que poder declarar dentro de este proceso supone para él "dar un salto" y poder "pedir justicia como víctima de tortura y exigir que se castigue a los culpables".
También lo hará un familiar de Ariztimuño, "asesinado sin mediar juicio alguno, lo mismo que los 196 que se contabilizan como asesinados e inhumados en el cementerio de Hernani, y que sufrió gravísimas torturas en la cárcel de Ondarreta".
"En cinco meses mataron a ocho sacerdotes junto a cientos de civiles. Fue un genocidio en toda regla", ha subrayado.
Proceso judicial "simbólico"
Para Ibargutxi, el hecho de que estas personas puedan declarar ante la Judicatura española es "muy importante", a la vez que "simbólico", puesto que "visualiza que esta querella va adelante".
Además, ha señalado que la plataforma vasca no espera "nada" del Gobierno actual y confía en que, tras las próximas elecciones, pueda haber un nuevo Ejecutivo que contribuya a un "relato verídico" de lo ocurrido, ya que, hasta la fecha, "no hay ningún franquista que haya sido juzgado y condenado".
En ese sentido, ha insistido en la "responsabilidad subsidiaria" que corresponde a los estados porque "estamos hablando de crímenes de lesa humanidad". De este modo, ha incidido en que, si Alemania lo ha hecho con el nazismo, "el Estado español debe hacerlo porque en 40 años no ha sido capaz de exigir responsabilidades y romper con una dictadura de miles y miles de víctimas".
Finalmente, ha pedido el apoyo y la solidaridad de las instituciones guipuzcoanas y ha reiterado la necesidad de que se tenga en cuenta, como lo hace la querella argentina, que "la violencia no empieza en el año 1960 como pretenden algunos, sino en el año 1936 con el golpe militar".
"Hemos de rescatar la memoria y la verdad de estos hechos si queremos una buena base para la paz y la convivencia", ha concluido.