Referéndum en Cataluña
Urkullu pide a Juncker la intervención y la mediación de la UE en Cataluña
Agencias | Redacción
El lehendakari ha remitido una carta al presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, en la que indica que peligra la estabilidad del Estado y de la propia Unión.
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Euskaraz irakurri: Urkulluk EBk Katalunian esku hartzea eta bitartekotza egitea eskatu du
El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha pedido por carta al presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, la intervención y mediación de la UE en el conflicto de Cataluña porque "está en riesgo la estabilidad del Estado español", pero también la de la Unión, ya que el problema se puede "extender a otras realidades y escenarios delicados" que existen en la actualidad. En este sentido, cree que "debe imperar la cordura" porque "no están brillando el sentido de Estado y el fin último de la estabilidad europea".
En la misiva remitida a Juncker, a la que ha tenido acceso Europa Press, Urkullu hace una reflexión sobre la situación catalana, en la que destaca que "el 1 de octubre ha convulsionado no solo Cataluña", sino "también a un Estado de la Unión Europea y a la propia Unión Europea".
A su juicio, se ha "visualizado que estamos ante un problema de proporciones históricas y que si no se aborda con rigor y visión política puede desencadenar, también por extensión a otras realidades, escenarios delicados para la UE, en un tiempo como el que nos hallamos de reflexión sobre el proyecto de la propia Unión".
"Desde mi responsabilidad institucional y desde la humildad de presidir un Gobierno que representa a un pueblo pequeño en términos demográficos, pero grande en visión europea y vocación internacional a lo largo de su historia, una nación europea sin estado, he estado y estoy intentando que la cordura política e institucional impere y se abran cauces de diálogo político que están cerrados", ha afirmado.
En riesgo, la estabilidad del Estado y de la UE
Asimismo, asegura que en ese esfuerzo continuará, "aunque el muro oscuro de la incomprensión impere". "Debemos derribar el muro porque, de lo contrario, la estabilidad del Estado español está en riesgo y, en consecuencia, también la de la Unión. En los momentos más dramáticos de la crisis del Euro, la crisis financiera de España (que no del conjunto del Estado, como fue en Euskadi) fue un episodio dramático que pudimos solventar entre todos porque la estabilidad del proyecto europeo estaba en juego", ha añadido.
Iñigo Urkullu ha manifestado que "la situación actual es diferente, pero no menos dramática en términos de estabilidad política y, además, aflorando sentimientos".
"Me permito escribirle como europeísta de convicción; no en vano represento la historia de mis antecesores que mostraron su decidida apuesta por el Proyecto europeísta, formando parte, de manera humilde y desde el exilio, del gran proyecto europeo impulsado por los padres fundadores", ha aseverado.
Tras apuntar que su preocupación "es importante", considera, "con el debido respeto y responsabilidad, que la Unión debe impulsar el desbloqueo dada la incapacidad que impera". "Mis llamamientos tanto al presidente del Gobierno de España como, en su momento, al Jefe del Estado están teniendo como respuesta el silencio, o no la respuesta que estimo para la convivencia de realidades nacionales diversas y la evitación de la fractura social", ha afirmado.
"La cordura debe imperar"
El lehendakari recuerda que se ha manifestado "muy claramente en relación con el referéndum y ello no ha sido obstáculo para que representantes políticos de Cataluña, que buscan una salida política a la situación, soliciten que trabajemos para lograr puentes".
"Yo me he mostrado activo y sigo intentándolo. Considero que la cordura debe imperar y, en estos momentos, el diálogo sin condiciones y con voluntad de acuerdo es absolutamente necesario. Considero también, y me duele decirlo, que el sentido de Estado y el fin último de la estabilidad europea no están brillando, y mucho me temo que ni esté en la agenda política de quienes con responsabilidad política-institucional de Estado debieran contemplarlo", ha subrayado.
En este contexto, considera que "hay que evitar cortocircuitos innecesarios e interesados que impidan restablecer un diálogo positivo". "El problema desde el 1-O no es solo de Cataluña, es de un Estado, de la Unión Europea, significativo para la estabilidad europea y, por ende, de la Unión", ha manifestado.
Por todo ello, ha reclamado que, "con la voluntad del mejor desarrollo de la convivencia de las naciones sin estado en estados compuestos en un proceso de construcción de Unión en base a sus principios fundacionales", intervenga. Por último, se pone "humildemente" a disposición de Juncker.