AUDIENCIA NACIONAL
Lamela deja a Trapero a un paso del juicio tras terminar la instrucción de la causa
AGENCIAS | REDACCIÓN
La magistrada da por cerrada la instrucción contra Trapero y la ex cúpula de Interior y ha remitido la causa a la Sala de lo Penal para que abra la fase de preparación del juicio.
Euskaraz irakurri: Lamelak Traperoren aurkako instrukzioa amaitu du eta epaiketaren atarian utzi du
La magistrada de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, ha concluido la instrucción abierta contra el mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, la intendente Teresa Plana, el ex director de los Mossos, Pedro Soler, y el ex secretario de Interior, César Puig. A su vez, ha informado de ello a la Sala de lo Penal para que abra la fase de preparación del juicio.
En un auto, la titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 ha declarado concluso el sumario de la causa y lo ha remitido a la Sección Primera de la Sala de lo Penal, dando diez días de plazo a las partes para pronunciarse.
Trapero está procesado en la Audiencia Nacional por dos delitos de sedición y uno de organización criminal por los hechos ocurridos el 20 y 21 de septiembre frente a la Consejería de Economía en Barcelona y el referéndum del 1 de octubre.
Asimismo, la magistrada procesó a Puig y Soler por organización criminal y un único delito de sedición, por el 1 de octubre, mientras que a Laplana le atribuye un solo delito sedición en relación con los incidentes del 20 y 21 de septiembre.
Después de toda la instrucción de la causa, que comenzó a finales de septiembre de 2017, Lamela concluye que Trapero, Soler y Puig integraban una organización jerarquizada "bajo una dirección común en cuya cúspide se encontraba el president de la Generalitat de Cataluña", Carles Puigdemont, que tenía como objetivo la celebración del 1 de octubre y la declaración de independencia del 27 de octubre.
Según la magistrada, los mandos ordenaron a los agentes que no actuasen, que se mantuviesen al margen y además, que vigilasen los desplazamientos y las actuaciones de la Guardia Civil y la Policía Nacional.
En el texto Lamela explica, además, la utilización por parte del cuerpo policial autonómico durante el 1-O de un código propio –'Clave 21'-- que consistía en la utilización de un canal alternativo --disponiendo cada dotación de un número de contacto al que llamar-- para emitir informaciones o incidencias que no debían transmitir por la emisora corporativa, para lo cual se usaron tanto móviles particulares como corporativos.
En el relato de hechos del auto, de 37 páginas, la titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 concluye que del contenido de las comunicaciones intervenidas en dicha jornada se desprende la falta de colaboración con los demás cuerpos policiales puesto que "se ordena que no actúen, que no hagan nada, que se mantengan al margen, que no intervengan y que solo observen e informen y se sitúen en posición segura".