Contactos
Semana clave para los pactos del futuro Gobierno de Navarra
agencias | redacción
Esta semana la socialista María Chivite iniciará una ronda de contactos para la que ha invitado a Geroa Bai, Podemos e Izquierda-Ezkerra.
Después de un mes de declaraciones pre y postelectorales llega la hora de bajar a la arena, de hablar, negociar e intentar pactar el futuro Gobierno de Navarra, una tarea que no se presenta fácil a priori para ninguno de los posibles candidatos.
Con el reto de "liderar" el próximo Ejecutivo foral, esta semana la socialista María Chivite iniciará una ronda de contactos para la que ha invitado a Geroa Bai, Podemos e Izquierda-Ezkerra.
Su objetivo es conformar un gobierno "progresista" para el que no cuenta con EH Bildu, una "línea roja" para los socialistas navarros, aunque tampoco ha llamado a Navarra Suma, la plataforma formada por UPN, PP y Cs. Muchos aseguran, además, que lo que haga el PSN en Navarra se decidirá en los despachos de Madrid.
Mientras, se han sucedido los llamamientos públicos al PSN por parte del candidato de Navarra Suma y presidente de UPN, Javier Esparza, convencido de que solo hay dos posibles gobiernos: uno pactado con el PSN y presidido por él o uno de "todos contra Navarra Suma".
Y si de partida las posiciones no parecen compatibles, los números aún complican más la situación ya que nadie cuenta de entrada con la mayoría necesaria para superar un proceso de investidura.
Esparza parte con 20 votos de los 50 escaños que hay en el Parlamento foral y no sumaría ni uno más si Chivite mantiene su palabra de no darle su apoyo.
Pero tampoco Chivite tendría suficientes votos para ser presidenta con los 23 que sumarían PSN (11), Geroa Bai (9), Podemos (2) e Izquierda-Ezkerra (1) en el caso de que consiguieran cerrar un acuerdo a cuatro.
Se presenta así como imprescindible en ambos casos que alguien se abstenga y en el caso de Javier Esparza las miradas se dirigen al PSN, mientras que en el de María Chivite el apoyo por omisión sería el de EH Bildu.
Dos opciones que a día de hoy no son probables si las partes mantiene sus posiciones, ya que Chivite ha dicho públicamente que la "única" opción de Esparza para ser presidente es que le apoye EH Bildu y la coalición abertzale le ha advertido al PSN que sus 7 escaños entran en la aritmética y "no puede esperar que le salgan gratis".