Pacto EH Bildu-PSOE-Podemos
El paso atrás del PSOE pone en duda el alcance de la derogación de la reforma laboral
EITB.EUS
Mientras EH Bildu y Unidas Podemos aseguran que la derogación de la reforma laboral será total, desde el PSOE afirman que solo se suprimirán "los aspectos más lesivos".
El acuerdo alcanzado ayer entre EH Bildu, PSOE y Unidas Podemos para derogar íntegramente la reforma laboral ha generado tal revuelo tanto en los partidos de la derecha como en la patronal CEOE, que los socialistas han difundido esta pasada medianoche una nota aclaratoria en la que afirman que solo suprimirán los aspectos más lesivos de la ley.
La coalición soberanista ha hecho público el acuerdo y el texto, que está firmado por Adriana Lastra (PSOE), Pablo Echenique (Unidas Podemos) y Mertxe Aizpurua (EH Bildu), no deja lugar a la duda, ya que afirma literalmente que "las fuerzas políticas que suscriben este acuerdo se comprometen a derogar de manera íntegra la Reforma Laboral del año 2012 impulsada por el Partido Popular".
EH Bildu y Unidas Podemos coinciden al subrayar que el objetivo del pacto es muy claro y que si lo han firmado es para cumplirlo. Sin embargo, el matiz realizado por los socialistas ha sembrado la duda sobre hasta dónde llegará la derogación de la reforma laboral.
El vicepresidente segundo y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha asegurado que la derogación será total, pues así consta en el acuerdo, algo que ha compartido la responsable de la cartera de Igualdad, Irene Montero: "Lo firmado está firmado", ha asegurado en una entrevista en TVE.
En una entrevista en Euskadi Irratia, la diputada de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, ha destacado que el pacto sigue vigente y que el matiz introducido por el PSOE "es más una cuestión de forma que de fondo".
En ese sentido, ha señalado que la coalición soberanista es consciente de que "la reforma laboral no se puede derogar de un día para otro" y que habrá que establecer los criterios para llevarlo a cabo. Así, se ha mostrado convencida de que el acuerdo se cumplirá.
Por su parte, Arnaldo Otegi ha subrayado que "los acuerdos son para cumplirlos" y ha añadido que "las notas aclaratorias o están a pie de página del acuerdo o son interpretaciones que alguien se ha visto en la necesidad de hacer".
El líder de EH Bildu ha recalcado que lo firmado este pasado miércoles es "un gran acuerdo que hay que desarrollar e implementar" y ha negado tajantemente que su formación vaya a suscribir un nuevo pacto distinto a ese.
Pero el PSOE ha transmitido una idea diferente. La portavoz socialista en el Congreso, Adriana Lastra, ha resaltado que lo que pretende el Gobierno español es derogar los aspectos más lesivos de la reforma laboral, no derogarla entera.
El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, también se ha manifestado en ese sentido y ha afirmado que "la derogación será parcial, es decir, desaparecerán el despido por absentismo o determinadas limitaciones en los convenios colectivos".
La vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha sembrado todavía más incertidumbre sobre este pacto al asegurar que sería "absurdo y contraproducente" abrir en estos momentos un debate sobre la reforma laboral y ha garantizado que cualquier eventual modificación se hará "de manera dialogada con los agentes sociales".
"Con la realidad que tenemos sobre la mesa sería absurdo y contraproducente abrir un debate de esta naturaleza y generar la más mínima inseguridad jurídica", ha dicho la vicepresidenta, tras recordar que España está en estado de alarma, que han muerto 27.000 personas, que la caída del PIB se estima en más del 9 %, que hay 3 millones de trabajadores afectados por un ERTE y que se espera "un sustancial aumento de la pobreza".
El documento firmado por EH Bildu, PSOE y Unidas Podemos.
Presión de PP, Vox y Ciudadanos
Mientras los protagonistas del acuerdo ofrecían sus explicaciones, los partidos de la derecha y extrema derecha han lanzado duras críticas al Gobierno de Pedro Sánchez.
Vox ha abandonado las sesiones de trabajo de la nueva Comisión del Congreso para la Reconstrucción y la portavoz del PP en el organismo, Ana Pastor, ha pedido que no haya más "pactos oscuros" como el de EH Bildu en este proceso de recuperación del país.
Más tarde el líder de los populares, Pablo Casado, ha advertido de los riesgos que supondría terminar con el modelo laboral que aprobó el Gobierno de Mariano Rajoy. El PP ha augurado "colas del hambre" si esto ocurre.
Ciudadanos, uno de los artífices de que la quinta prórroga del estado de alarma fuera autorizada, ha reprobado el acuerdo sobre la reforma laboral porque "genera una incertidumbre inmensa" en los ciudadanos, especialmente en materia económica.
El acuerdo enfada a la patronal
Por otro lado, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha anunciado este jueves que suspende la presencia de la patronal en las mesas de diálogo social y ha dicho que el acuerdo de EH Bildu, PSOE y Unidas Podemos es "un auténtico dislate y una irresponsabilidad mayúscula", que puede tener "consecuencias incalculables" en la confianza en la economía española para empresas nacionales y extranjeras.
"Me parece muy grave lo firmado", ha subrayado tras asegurar que el pacto para la derogación de la reforma laboral "ha cogido por sorpresa a empresarios y sindicatos", y ha señalado que el Gobierno "tendrá que aclarar muy bien lo que significa".
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha pedido a la CEOE "mesura" para continuar en la senda del diálogo y ha calificado de "música de la mala" el acuerdo con EH Bildu, por incluir un asunto que debería pasar por la mesa de negociación que se abrió a principios de año para abordar la reforma laboral y que ahora está "hibernada" con todos los esfuerzos centrados en las medidas por la COVID-19.
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, se ha manifestado en la misma línea y ha dicho que "sería bueno huir de voluntarismos y retomar la agenda para la derogación de la reforma laboral que fue interrumpida por la crisis sanitaria, contando con el marco de diálogo social y sabiendo que se requiere una mayoría parlamentaria para hacerlo".
ELA y LAB aplauden el pacto, pero no se fían del PSOE
Entre tanto, los sindicatos mayoritarios de Euskal Herria, ELA y LAB, han valorado positivamente el acuerdo para la derogación de la reforma laboral, ya que es “una victoria para la clase trabajadora”.
El sindicato ELA ha reclamado que se deroguen las reformas implantadas durante el mandato de José Luis Rodríguez Zapatero (2010-11) y de Mariano Rajoy (2012), si bien "consideraría una gran noticia que se cumpliera y desarrollara la literalidad de lo firmado ayer".
Sin embargo, "la inmediata reacción del PSOE y su histórico descrédito en numerosas situaciones augura pocos avances" y "es muy probable que ese texto no se aplique en casi ninguno de sus puntos", ha augurado el sindicato.
El sindicato LAB ha exigido "el cumplimiento del acuerdo para la derogación completa de la reforma laboral" ya que "ha sido una de las principales herramientas para deteriorar las condiciones laborales de los trabajadores vascos en los últimos ocho años".
En un comunicado, la central sindical ha calificado el acuerdo inicial alcanzado este miércoles entre PSOE, Unidas Podemos y EH Bildu como "una victoria para toda la clase trabajadora, ya que derogaba de forma completa un acuerdo que tantos perjuicios ha ocasionado a los trabajadores" y, además, era "una decisión que había que adoptar para terminar con la precariedad laboral, que la clase trabajadora vasca agradece".