Navarra
Chivite limita los comentarios en sus redes para evitar que sean usados como "altavoz del odio"
EITB Media
En un mensaje colgado en su perfil de X, la presidenta de Navarra denuncia "el bullying virtual" al que está siendo sometida con comentarios que incluyen "amenazas e insultos ofensivos, en su mayor parte, de índole machista".
Euskaraz irakurri: Chivitek mugatu egin ditu bere sareetan egin daitezkeen iruzkinak "gorrotoaren bozgorailu" ez bihurtzeko
La presidenta de Navarra, la socialista María Chivite, ha anunciado este jueves que ha restringido los comentarios en sus redes para evitar que sean usados como "altavoz del odio". En concreto, solo permitirá comentarios de sus seguidores y aquellas personas "de carne y hueso, con nombres y apellidos, que estén dispuestas a opinar lo que les de la gana con educación".
En un mensaje colgado en su perfil de X, la presidenta navarra ha denunciado "bullying virtual" al que está siendo sometida con comentarios que realizan varios usuarios desde el anonimato. "Cada una de mis publicaciones es contestada por una cascada de comentarios que incluyen amenazas e insultos ofensivos, en su mayor parte, de índole machista", ha criticado.
Chivite considera que ha llegado el momento de "decir 'basta'". "No voy a consentir que utilicen mi nombre, el del Gobierno o el de Navarra como altavoz para transmitir odio", asegura.
"En mi trabajo, día a día, defiendo la buena política. La que confronta ideas y es capaz de llegar a acuerdos. Y, en coherencia, respeto la opinión que cualquier persona pueda tener sobre mi acción política y defenderé siempre su libertad de expresión para expresarla con respeto", ha explicado.
Así, ha concretado que a partir de ahora podrán seguir comentando sus publicaciones las más de 4000 personas "de toda condición y de todos los colores políticos" que sigue ella. Y también ha añadido que no tiene "ningún inconveniente" en aumentar esa lista a más personas "de carne y hueso, con nombres y apellidos, que estén dispuestas a opinar lo que les de la gana con educación".
En su opinión, permitir comentarios ofensivos y amenazas es "dejar la puerta abierta a que ese odio se extienda al mundo real". "Un riesgo que ya ha empezado a materializarse y contra el que todos y todas tenemos que actuar", ha concluido.