Juicio
El acusado del crimen de Gros, expulsado de la sala tras un altercado verbal
agencias | EITB Media
El inculpado, que se enfrenta a una petición de 25 años, ha interrumpido el relato del fiscal para asegurar que todo era "mentira", incluso se ha enfrentado a la presidenta del Tribunal.
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El procesado por matar a puñaladas a un hombre en el barrio de Gros de San Sebastián en marzo de 2020 ha sido expulsado de la sala en la que está siendo juzgado, tras provocar un altercado verbal en el que, después de ser reprendido por la presidenta, ha sido desalojado de la sala.
El incidente se ha producido este martes, al poco del inicio de la segunda jornada del juicio en el que el procesado se enfrenta a una petición de 25 años de cárcel por parte del Ministerio Público, cuando el fiscal se dirigía a los miembros del jurado en su turno de alegaciones previas para describir la secuencia del crimen.
En el instante en el que el fiscal explicaba la "conducta extremadamente violenta" del procesado mientras presuntamente apuñalaba a su víctima y explicaba cómo la fuerza que utilizó rompió la punta del cuchillo al asestarle una puñalada en el cráneo, el inculpado ha interrumpido su intervención y ha alegado que no quería seguir escuchando. El hombre se ha enfrentado verbalmente a la presidenta del Tribunal, cuando esta le ha pedido que se callara porque ya iba a tener oportunidad de contar su versión en otro momento del juicio.
En un primer instante, el acusado ha parecido tranquilizarse pero ha vuelto a interrumpir la sesión un poco más adelante para asegurar, entre otras cosas, que todo lo que estaba relatando el fiscal era "mentira" y formaba parte de un "complot" en su contra, algo que no iba a "aguantar" porque todo el mundo le estaba mirando como si tuviera "cara de asesino".
Ni los intentos de la magistrada por reconvenirle ni los de una familiar que se encontraba en la sala han tranquilizado al inculpado, por lo que finalmente la presidenta del Tribunal ha ordenado su desalojo y ha sido conducido por los agentes de la Ertzaintza que lo custodiaban a los calabozos de la Audiencia de Gipuzkoa, donde permanecerá hasta que llegue el turno de testificar ante el jurado, mientras el juicio continúa ya con normalidad en estos momentos.