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Manifiesto

La comunidad de la UPV/EHU denuncia "ataques a la convivencia pacífica" liderados por grupos minoritarios

EITB Media

En un manifiesto firmado ya por más de 1400 personas, rectorado, decanato, profesorado y alumnado censuran las "agresiones, insultos, amenazas, lanzamiento de pintura y deterioro del patrimonio público", por parte de aquellos "no aceptan las reglas de convivencia que rigen" en la universidad.

EHU-UPV.

Euskaraz irakurri: EHUko komunitateak gutxiengo taldeek gidatutako "elkarbizitza baketsuaren aurkako erasoak" salatu ditu

El rectorado, decanato, profesorado y alumnado de la UPV/EHU han impulsado y suscrito un manifiesto en el que denuncian "ataques a la convivencia pacífica" liderados por grupos minoritarios, a través de "insultos, amenazas, lanzamiento de pintura, deterioro del patrimonio público, e intimidación". En el documento, destacan que "la razón para estos desmanes" es que "no aceptan las reglas de convivencia que rigen" en la universidad pública vasca.

El texto, abierto a adhesiones a través de su firma en la web de la UPV/EHU, que han firmado ya más de 1400 personas, lleva el título de 'En defensa de la universidad pública y de las personas que trabajamos y estudiamos en ella', y critica los "repetidos ataques a la convivencia pacífica, mediante agresiones verbales y físicas, insultos y amenazas a personas, destrozos de equipamientos y de instalaciones" que se han producido en los últimos meses.

Señalan los "tristes ejemplos" de episodios violentos, como los acontecidos en el Vicerrectorado del Campus de Álava, en la Facultad de Letras, en la Facultad de Informática, en la Facultad de Educación, Filosofía y Antropología, en la Facultad de Ciencia y Tecnología, y en el Vicerrectorado del Campus de Gipuzkoa.

Tal como destaca el manifiesto, "parece que la razón para estos desmanes es no aceptar ni compartir las reglas de convivencia que rigen en la universidad" -Reglamento de Convivencia y el primer Código Ético-. "Obviamente, estas medidas pueden ser criticadas, pero, obviamente también, la crítica derivada de la libertad de expresión debe hacerse respetando la libertad de expresión de los demás", añade y asevera que "pretenden silenciar la discrepancia y eliminar así el debate y la convivencia".

En este sentido, los firmantes recuerdan que algunas de acciones violentas suponen "daños en la integridad" del patrimonio, "que debe ser repuesto utilizando dinero público", que procede de los impuestos de la ciudadanía, "que no es ilimitado y que, por tanto, dejará de ser destinado a otros fines".

"En definitiva, estos comportamientos atentan contra los derechos de personas, contra los bienes públicos y contra el prestigio de nuestra universidad pública", resalta el texto.

Tras calificar los ataques de "absolutamente inaceptables", agrega que esta declaración pretende "dejar claro que no nos callamos ante las agresiones". "Queremos que todas las personas que trabajan o estudian en la universidad se sientan cómodas y seguras en ella, que puedan expresarse y dialogar libremente, y que dejen expresarse también a las demás", asegura.

"Compartimos y lamentamos el dolor de las personas que han sido víctimas de unos comportamientos que condenamos sin paliativos, porque son profundamente antiuniversitarios", indica, y añade que "nuestra solidaridad con estas personas es también una repulsa enérgica ante cualquier acto de violencia, sea física, psicológica o verbal". 

Finalmente, recalcan que las personas que firman la declaración están "totalmente comprometidas con la defensa de la universidad pública, de sus valores y, por supuesto, de todas las personas que trabajan y estudian en ella".