Coronavirus
Así funciona Radar COVID, la app para rastrear contactos con COVID-19
Agencias
La app, que no utiliza la geolocalización ni recoge ningún dato de los usuarios, ya se puede descargar en Google Play y App Store, pero no estará completamente operativa hasta el 15 de septiembre.
Euskaraz irakurri: Horrela erabiltzen da Radar COVID aplikazioa, kutsatuen kontaktuak arakatzen dituena
Radar COVID es una aplicación móvil creada por la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial para alertar de contagios por coronavirus y prevenir así la expansión de la COVID-19.
En concreto, este servicio utiliza el bluetooth de los móviles para avisar a sus usuarios si han estado a menos de dos o tres metros de una persona contagiada en los 14 días anteriores a un nuevo diagnóstico.
No utiliza la geolocalización ni recoge ningún dato de los usuarios, sino que asigna números aleatorios a los móviles de los ciudadanos que voluntariamente se la instalan para avisarles de que tienen que contactar con las autoridades sanitarias por haber estado últimamente cerca de algún infectado, al que nunca se identifica.
La aplicación indica el día en el que se ha producido la exposición al contacto, pero no revela la identidad del usuario al que haya quedado expuesto, ni la identificación del dispositivo, ni el momento o lugar en que se ha producido la exposición. Recibida una notificación, la aplicación facilita al usuario expuesto información para la adopción de medidas preventivas y asistenciales, para contribuir con ello a contener la propagación del virus.
Así, la app garantiza la seguridad y privacidad de los usuarios y es 100 % anónima, por lo que no solicita ni el nombre, ni el número de teléfono, ni tampoco un correo electrónico. Radar COVID se puede descargar en Google Play, en el caso de los dispositivos con sistema operativo Android, y en la App Store en el caso de utilizar el sistema operativo iOS, que usa la marca Apple.
La app ya está disponible y registra los contactos, pero ahora es necesario que las comunidades autónomas la integren en sus servicios regionales de salud para poder notificar los contagiados y que esta herramienta envíe las alertas. La estimación del Ejecutivo es que esta aplicación esté completamente operativa a partir de próximo 15 de septiembre.
La prueba piloto se ha llevado a cabo en la isla canaria de La Gomera entre el 29 de junio y 31 de julio, periodo en el que se han simulado cuatro oleadas de rebrotes ficticios de COVID-19. Durante este periodo la app ha logrado unos "resultados altamente satisfactorios", puesto que ha conseguido doblar los datos de los rastreadores manuales.
Cómo funciona Radar COVID
En primer lugar, cada autonomía tiene que fijar a qué teléfono tendrán que llamar los contactos. Además, tienen que fijar qué agente sanitario se encarga de entregar el código a la persona infectada para que comunique su positivo a través de la aplicación.
Una vez se introduzca ese código, la app notificará a cualquier persona que tenga descargada la aplicación y haya estado a menos de dos metros durante al menos 15 minutos con un infectado; es decir, los mismos criterios que siguen los rastreadores manuales para decidir quién es un contacto estrecho. Por lo tanto, en la práctica supone automatizar el trabajo de estas personas que se dedican a localizar los contactos estrechos de las personas que se han infectado.
La aplicación utiliza la conexión bluetooth del terminal, a través de la cual los móviles emiten y observan identificadores anónimos de otros teléfonos que cambian periódicamente. Cuando dos terminales han estado próximos durante 15 minutos o más a dos metros o menos de distancia ambos guardan el identificador anónimo emitido por el otro.
Si algún usuario fuera diagnosticado positivo de COVID-19 tras realizarse un test PCR, decidiría si dar su consentimiento para que, a través del sistema de salud, se pueda enviar una notificación anónima.
De esta forma, los móviles que hubieran estado en contacto con el paciente recibirían un aviso sobre el riesgo de posible contagio y se facilitarían instrucciones sobre cómo proceder. Al no solicitarse datos de ningún tipo, es imposible identificar o localizar de forma alguna a ningún usuario.