Cuarto encierro
Un Garcigrande embiste a todos
eitb.com
La ganadería salmantina ha debutado en los sanfermines con un encierro temible en su primer tramo, por un astado que ha arremetido contra cuanto ha podido.
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La ganadería salmantina de Garcigrande ha debutado en los sanfermines con un encierro de los que ponen la piel de gallina, por las maneras de un astado que, una vez superada la cuesta de Santo Domingo, ha adelantado a sus hermanos y ha arremetido contra cuanto corredor ha cogido por delante. En su locura ha embestido con fiereza a media docena de mozos, aunque "solo" dos de ellos han sido corneados, y no se encuentran graves. Podría haber sido mucho peor.
Afortunadamente, la tensión se ha visto rebajada en la calle Estafeta, donde, con los toros menos envalentonados, los corredores han podido lucirse ante las cornamentas.
El encierro ha sido rápido, con una duración final de 02:30 minutos. Solo el encierro de ayer, de 03:22, ha roto esta media en unos sanfermines que se están caracterizando por su velocidad vertiginosa.
Durante la carrera de hoy, un ramo de flores ha recordado en el tramo de Telefónica a Daniel Jimeno, el joven madrileño fallecido hace hoy cinco años. Es el último corredor fallecido en el encierro.
Tras los tres cantos de rigor al santo, que desde 2009 también se realizan en euskera, los toros han enfilado la cuesta de Santo Domingo hermanados y empujados por los cabestros. La carrera ya se preveía rápida en ese momento.
Pronto, un astado negro ha tomado la delantera, dejando atrás a sus hermanos, y ha embestido a varios corredores: enfrente, a los lados, contra el vallado... Las imágenes quitan el hipo, y hacían prever un balance de heridos mucho mayor del que finalmente se ha dado.
La manada, en la curva entre Mercaderes y Estafeta. EFE
Pasado el susto, los toros han seguido rápido su carrera hacia la plaza del Ayuntamiento y Mercaderes. En la curva de Estafeta, la manada se ha agolpado hacia la pared izquierda, donde una de las reses ha quedado algo rezagada, y así ha llegado hasta la plaza acompañada por dos mansos.
El resto de la manada ha enfilado la recta de Estafeta unida y sin perder la velocidad, lo que ha hecho que hayan sido numerosos los corredores que han caído al no aguantar el ritmo de los animales, que sin embargo los han ignorado y han saltado sobre ellos.
Había curiosidad por el impredecible comportamiento de los Garcigrande en su primera aparición en los sanfermines, pero visto lo visto, su carrera estará marcada en rojo en próximas ediciones si repiten visita a las calles de Pamplona/Iruña.