"Boulevard"
Currin reclama a ETA que abandone las armas 'sin plantear condiciones'
Radio Euskadi
Afirma que uno de los "miedos" de la banda es que si declara el fin permanente de la violencia "no habría más diálogo político".
El abogado sudafricano y experto internacional en mediación de conflictos, Brian Currin, ha afirmado esta mañana en el Boulevard de Radio Euskadi que un alto el fuego de ETA "no es suficiente" puesto que debe abandonar las armas, y que esa decisión debe adoptarla "sin plantear condiciones".
Sin embargo, Currin ha admitido que "una de las preocupaciones de ETA", de "sus miedos", es que "si declarara el fin permanente de la violencia se alcanzaría la pacificación en el territorio y no pasaría nada más, no habría más diálogo político".
Entrevistado por Dani Álvarez, Currin, que se autodenomina "facilitador" en lugar de mediador, ha reconocido ser consciente de que el Gobierno central no dará ninguna respuesta hasta que la organización terrorista haya declarado el final de la violencia, y se ha mostrado tajante al asegurar que ni la extorsión ni la kale borroka pueden tener encaje alguno tras un hipotético alto el fuego verificable, permanente y unilateral, tal y como él mismo reclama.
Durante la entrevista, el abogado sudafricano ha anunciado que el grupo de contacto internacional -en el que, según ha avanzado, no habrá ningún ciudadano español-, comenzará a trabajar después de que ETA haya "respondido de forma positiva a la declaración de Bruselas y al acuerdo de Gernika", y se ha mostrado persuadido de que "el proceso continuaría adelante" incluso en el caso de que la formación ilegalizada no pudiera concurrir a los próximos comicios municipales y forales. Sin embargo, también ha apostillado que "si ETA hace lo que se le ha pedido", no debería "haber obstáculos para la legalización" de Batasuna.
Currin ha apostado por la puesta en libertad de Arnaldo Otegi, cuyo juicio arranca hoy en la Audiencia Nacional, porque, a su juicio, "ha sido un defensor importante de los medios no violentos", y ha destacado el papel de las víctimas al ser "una parte crucial tras cualquier conflicto", motivo por el cual "deben ser tratadas con gran sensibilidad". De hecho, ha minimizado la necesidad de que el hipotético proceso concluya con una amnistía porque, según reflexiona, "es difícil encontrar el equilibrio entre las víctimas y los causantes de la violencia".