"La Noche Despierta"
Exitosa première de 'Entrelobos'
I.C.
eitb.com
Un proyecto atípico que ha generado mucha expectación. Entrelobos está basada en la historia de Marcos, "el niño salvaje de Sierra Morena".
"Ha sido maravilloso", nos confesaba Gerardo Olivares, "pero las première son lo más peligroso del mundo. Te crees que eres la leche, que sales cortando el rabo y las dos orejas y mañana llega la taquilla y te deja crujío". El director y guionista de la película Entrelobos compartía sus impresiones con "La Noche Despierta" horas antes de su estreno en cines. Llega con 220 copias.
Entrelobos es la extraordinaria historia de Marcos Rodríguez Pantoja, un hombre que durante 12 años vivió aislado en el corazón de Sierra Morena. Tenía 6 años cuando su padre, acuciado por las deudas, le vendió a un cabrero. En él descubrió, sin embargo, a un verdadero padre. Fue él quien le transmitió todos los secretos del valle; enseñanzas que le permitieron sobrevivir y convivir con una manada de lobos que hizo las veces de familia. Marcos se convirtió en el rey del valle, renunció al género humano y fue feliz.
El reto de rodar con animales
"El gran reto de Entrelobos", explica Olivares, "ha sido convertir a los animales en actores e integrar la naturaleza dentro de la ficción con un sentido, no gratuitamente". Con una sonrisa, el director cordobés cuenta que no han sido los lobos sino las cabras de Sierra Morena las que le han llevado por la calle de la amargura: "Los días que teníamos secuencias con cabras nos tirábamos de los pelos porque no sabíamos a qué hora íbamos a acabar".
El actor Juan José Ballesta, que encarna a Marcos con 20 años, fue quien más roce tuvo con los cinco lobos ibéricos que participan en la trama. "Yo no he visto una cosa igual", nos decía Olivares. "Los lobos le tenían miedo a Ballesta. Todas las noches cuando terminábamos de rodar tenía más mataduras que un borrico viejo. Lleno de arañazos, de moratones pero feliz se metía a dormir como un ceporrillo".
En la première ha estado también Marcos Rodríguez, el hombre que inspiró el guión. "Él está viviendo un sueño", cuenta Gerardo Olivares. "Siempre ha querido contar su historia pero nunca le han creído. Le han tomado el pelo y se han reído de él". Olivares asegura que la película es una forma de "devolverle la dignidad" y apostilla: "Marcos salió hace 40 años del bosque pero el bosque nunca ha salido de él".