¿Vivimos con la hora cambiada?

Numerosos estudios alertan de ello; los horarios españoles no son compatibles con la vida familiar y de ocio. Jornadas interminables, presentismo en lugar de eficiencia, dos horas para comer, el prime time televisivo que acaba pasada la medianoche...Todo ello hace que España sea una anomalía en Europa. Resultadodo: trabajadores cansados por la falta de sueño y baja productividad.

Cambiar esta inercia pasa por una clara voluntad política que, hasta ahora, ha brillado por su ausencia. Esto es lo que piensan nuestros invitados José Luis Casero, presidente de ARHOE, y José María Martín Olalla, profesor titular de Física de la Universidad de Sevilla.