Ángela Loidi, viajera centenaria: 'Mi hobby es viajar'

Ángela Loidi es toda una lección de vida: a sus 100 años recién cumplidos, nos recibe en su casa del centro de San Sebastián, justo antes de pasarse por su farmacia "para abrir la correspondencia", como hace cada día desde que se jubiló a los 92 años.

Pionera donde las haya, recuerda con nostalgia cuando con 23 años abrió su primera botica en Pasajes de San Juan en 1941. "Fue el día en que murió Alfonso XIII y tuvimos que posponer la apertura con miedo de que nos echaran a perder las fórmulas magistrales que teníamos ya preparadas". Y es que, en esa época no había frigorífico y tampoco penicilina. "Sólo la vendían en Estados Unidos; aquí vino en el 1944 o 1945". No es amiga de medicarse en exceso y confiesa que "sólo tomo vitaminas para las uñas".

Viajar ha sido y es la medicina para Ángela. Ésta farmacéutica madre de familia numerosa nos cuenta que pasó 25 años sin poder cogerse vacaciones. Pero cuando  sus hijas se licenciaron e hicieron cargo de la botica, ella y su marido se desquitaron. Ángela hizo la maleta pasados los 50 y aún no tiene intención de deshacerla; ha visitado más de 40 países en los cinco continentes "con 89 años estuve en Irán, con 90 en Yemen, con 91 en Uzbekistán, con 92 en Armenia" recita de carrerilla haciendo gala de una memoria prodigiosa.

Los recopilatorios de fotos y videos de todos estos viajes que ella misma convierte en películas, con voz en off y música incluídos, confiesa "le mantienen la memoria viva". "Solemos quedar para cenar y verlos en familia" nos indica esta "amona" centenaria que presume de su prole. Pero aún le quedan mucho material por editar. Por ejemplo, el de su próximo viaje, al que está ya dando forma: "Estoy intentando animar a mis hijos para ir en el Puente de La Purísima al norte de Francia" sonríe divertida.