Se ha escrito un crimen
Cal viva, hormigón y sosa cáustica: cómo deshacerse de un cadáver
Existen muchas formas de hacer desaparecer el cuerpo del delito. Analizamos las más comunes y las más efectivas.
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Los cadáveres de Sandra Capìtán, su hija Lucía y la pareja de la madre, eran hallados sepultados bajo hormigón y cubiertos con sosa cáustica en un patio de Dos Hermanas. Culminaba así una búsqueda iniciada en 17 de septiembre en que desaparecieron las dos mujeres. Todo apunta a un ajuste de cuentas por narcotráfico.
Una discusión laboral fue el móvil de un crimen que estuvo a punto de no ser resuelto. Sin embargo, el cadáver de la víctima, enterrado en cal viva, 'habló' 17 años después, aunque el delito había prescrito. Ocurrió en Muskiz.
Y un tercer caso: la aparición de nuevos restos de la víctima del crimen de submarino. Buzos de la Marina danesa han encontrado la cabeza y las piernas de la periodista sueca Kim Wall.
De todo ello hablamos con nuestros colaboradores: Rafael Alcaraz, médico forense jubilado, y Carlos Bassas, escritor y director del certamen Pamplona Negra.