'Mi madre construyó un muro de contención para protegerme y protegernos'

Boris Izaguirre, fue un niño despierto, curioso y que disfrutaba llamando la atención a su alrededor en su Caracas natal. También disléxico y amanerado. El mostrarse sin coraza, al natural le granjeó una infancia y adolescencia difícil fuera de la atmósfera liberal y bohemia que reinaba en casa de sus padres y donde él disfrutaba participando en debates sobre arte, pintura o política.

Su madre, la bailarina profesional Belén Lobo tiene un especial protagonismo en su vida, y así lo refleja el autor en su novela Tiempo de Tormentas; fue ella quien, como confiesa el escritor, lo protegió y ayudó a superar el trauma de una violación.

Asimismo, su progenitora lo animó a probar suerte en España donde un joven Izaguirre que venía de escribir guiones para telenovelas, se convirtió en una estrella mediática en el ya mítico late show televisivo 'Crónicas Marcianas'.