Decano: 'En 15 años puede haber hasta un 40% de jubilaciones en medicina'

Es muy probable que su médico de familia, su traumatóloga, el pediatra que atiende a sus hijos, su oncólogo, esa persona en la que confía su salud, haya salido de cualquiera de las promociones de la Facultad de Medicina de la Universidad del País Vasco. Desde la primera promoción de la Licenciatura de Medicina, allá por el año 1974, 12.500 profesionales médicos han salido de sus aulas, y muchos de ellos son aquellos que trabajan en cualquiera de las consultas, especialidades o quirófanos de Osakidetza, mutuas o clínicas privadas de Euskadi.

Medicina es una profesión muy respetada y también muy demandada. Por cada seis solicitudes que se presentan para entrar en la Facultad de Medicina de la Universidad del País Vasco, solo una es aceptada. Hay un consenso general en que hacen falta más médicos, más plazas en Medicina pero lo difícil es saber cuánto y cómo crecer. Hay dos Universidades del entorno más cercana que quieren además abrir Facultades de medicina; una la de Deusto, la otra la Universidad Pública de navarra, la UPNA

En 'Boulevard' de Radio Euskadi celebramos desde la Facultad de Medicina los 50 años de esta facultad con el Decano Joseba Pineda, el profesor de fisioterapia Jon Torres, la profesora e investigadora Patricia Aspichueta, la profesora de biología molecular Lola Boyano, el profesor en fisiología Jon Irazusta y varios alumnos.

En palabras del Decano la facultad ha crecido 'en 20% de las plazas' y añade que tienen que regular 'el número de plazas de alumnos y alumnas al número de plazas MIR que salen' ya que si no lo hacen corren el riesgo de 'que hagamos una bolsa de futuros titulados y tituladas que se queden sin plaza'.

Pineda destaca que 'con las actuales plazas de alumnos y alumnas somos capaces de reemplazar la totalidad de los médicos que se van a jubilar'.

Entre las cuestiones que preocupan al Decano de la Facultad de medicina está el que 'se pueda desviar dinero público a intereses de tipo privado' como ha sucedido en algunas universidades.

Pineda explica que el propósito de guardar un porcentaje de plazas para los alumnos que deseen cursas el grado en euskera es que 'una bolsa de estudiantes muy importante suele matricularse en muchas universidades' ocupando una plaza que 'puede quedar abandonada' tras unos meses, 'quitando la plaza a otros estudiantes a los que ya no se les puede llamar'. Añade que pueden tener un '25% de matriculas condicionadas y eso genera un grado de incertidumbre para saber cuantos estudiantes entran en cada promoción y al ser estudiantes que vienen de fuera, desplazan y nos rompen la oferta lingüística que tenemos'.