'La escuela de fútbol no ha estado a la altura y hay más gente afectada'

'Antes te quiero enseñar una cosa. ¿Ves, ahí, tres puertas más adelante? Ahí vive mi agresor. Todos estos años ha pasado todos los días por delante de mi puerta'. Así comienza una entrevista que rompe el silencio de más de tres décadas, 36 años desde que Pepe Godoy sufriera abusos sexuales por parte de un vecino del pueblo, técnico en una escuela de fútbol de Basauri, Baskonia Futbol Eskola. En todo este tiempo no se lo pudo contar ni a su esposa, cuando compraron la vivienda en la que residen, a pocos metros del agresor.

'Se hizo muy amigo mío, me compró cosas, me regaló la camiseta de Zubizarreta, me compraba chuches... Todo tipo de regalos'. Así se ganó el agresor la confianza de Pepe, hasta llegar a tener una relación muy estrecha, 'como la que puedo mantener con mi mujer, relata, pero sin penetración, así fue'. Ocurrió durante tres años, hasta los once. 'Era consciente de lo que pasaba, sabía que estaba mal, pero me sentí partícipe de ello, porque lo estaba permitiendo', recuerda Pepe.

A partir de ahí, de ser 'Pepe peleas' en el barrio, pasó a ser un chico con miedos, pesadillas, manías que no le dejaban vivir. Dormía con cuchillos y agujas debajo de la almohada. 'En mi casa detectaron que estaba mal, me llevaron al ambulatorio, pero nunca les dije lo que había pasado', explica. Y ese miedo ha durado hasta hace dos años, hasta que vio un reportaje en televisión donde una víctima relató los abusos que sufrió en la infancia. Al día siguiente se lo contó a Yoli, su mujer. ¿Lo peor? 'Me miraba en el espejo y decía: ¿quién eres? No me reconocía', relata Pepe entre lágrimas.

'Ha habido muchos afectados en el pueblo. Como cuando la peste, que se marcaban las casas con una 'x', aquí según la generación en la que hayas vivido, también estás marcado; la gente de mi generación lo sabe, yo he dado la cara, pero hay más gente marcada, no es algo que no se supiera', relata Pepe. También lo supieron en la escuela de fútbol Baskonia, donde trabajaba el presunto agresor. 'Les conté todo con pelos y señales para que lo retiraran, y no lo hicieron; la escuela no ha estado a la altura, porque lo importante no es el club o la escuela, lo importante es que ha pasado en Basauri'. Asegura que ha visto 'en varias ocasiones' el mismo patrón que este hombre desarrolló con él, 'una y otra vez' con otros niños de la localidad. El Baskonia no hizo nada por evitarlo, a pesar de saberlo.

Pepe Godoy pide a los padres cuyos hijos han podido estar en contacto con el técnico de fútbol 'que no se queden en el 'no' del niño'. Entiende que habrá padres aterrorizados al saber que su hijo ha podido sufrir abusos similares. 'Yo fui al psicólogo, y no me sacaron nada. Que busquen alguien especializado, que no lo dejen pasar', ha aconsejado.

36 años después, Pepe Godoy ha conseguido superar lo sufrido y las secuelas que le provocó. Han sido necesarios dos años de terapia individual, grupal y taller de secuelas. 'Desde que lo conté he ido creciendo, como más maduro, ya no miro debajo de la cama, soy una persona más tranquila', describe.

VÍDEO: Testimonio de Pepe Godoy