'La iglesia vasca no ha dicho todo sobre ETA'

Se ha cumplido un año de la desaparición definitiva de ETA. El periodista Pedro Ontoso trata en su libro Con la Biblia y la Parabellum sobre la relación de la iglesia vasca con ETA. 'En todo este proceso ha habido hombres de iglesia, al principio, muy pocos, que estaban en labores de infraestructura y logística dentro de ETA, y otros hombres de iglesia, con hábitos, que han intentado que antiguos miembros de ETA rompieran con la organización y se alejaran de sus postulados violentos'.

Según Ontoso la iglesia vasca 'daba tantas explicaciones en sus comunicados, que eso afectaba a su nitidez y a su credibilidad' y añade que uno de los temas que se le puede reprochar es 'no haber liderado el dolor de las víctimas', en su opinión la iglesia vasca 'ha llegado tarde y con poca fuerza'. 'Los obispos se reunían con las víctimas pero faltaron gestos públicos'. Añade que a la iglesia 'le hace falta hacer una autocrítica severa' y aunque 'han hecho una aportación muy importante para normalizar la convivencia, la iglesia tienen que estar con las víctimas y los victimarios'.

El periodista explica en 'Boulevard Informativo' de Radio Euskadi que hay 'un sacerdote claretiano vizcaíno, Josu Zabaleta, que fue una referencia dentro de las cárceles y que hizo muchos kilómetros para ir a cárceles y acompañar y reflexionar muy sinceramente con antiguos jefes de la organización. Eso hay que valorarlo'.

Son muchos los hombres de la iglesia que trabajan en las cárceles con miembros de ETA, es el caso de Josu Zabaleta 'un hombre de paz, nacionalista de cuna, hombre muy cabal y honesto que ha estado con Kepa Pikabea, con Urrosolo Sistiaga, con Txelis. En el funeral de Zabaleta estuvieron el lehendakari Urkullu y antiguos miembros de ETA llorando por él'.

Cuestionado sobre la relación de la Conferencia Episcopal y el Vaticano con la iglesia vasca, Ontosa señala que 'la iglesia vasca tuvo mucho voz ante el fenómeno del terrorismo dentro de la Conferencia Episcopal. Setien, el gran ideólogo de la iglesia vasca y el gran referente del nacionalismo era respetado en Madrid y el Vaticano dejaba hacer' pero la cosa cambia en el '2002 cuando la iglesia vasca publica una pastoral ante la ley de partidos del gobierno de Aznar, advirtiendo de las consecuencias que puede acarrear y eso sienta muy mal en el gobierno, que se queja al Vaticano, y en la iglesia de Rouco'. Ante estos hechos 'el Vaticano empieza a relevar al episcopado vasco. El nombramiento de Munilla supone un tsunami tremendo, se interpreta como una desaprobación a la iglesia vasca y una humillación sobre el propio Uriarte'.

Pedro Ontosa asegura que Joseba Segura, el obispo auxiliar de Bilbao, 'es uno de los grandes artesanos de la paz en este país'. Sobre el nombramiento reciente del arzobispo de Tarragona señala que 'es un hombre muy intelectual y catalanista, puede ser una pieza clave en unas futuras conversaciones entre el gobierno catalán y el español'.