"Al levantarme escucho informativos pero el resto del día es para la música"

José Manuel Zapata nació en Granada en 1973 y ha cantado en los teatros de medio planeta. Vivió en hoteles muchos años y un día, al levantarse, decidió que la felicidad estaba por encima de todo. Y en esa filosofía, acaba publicar Música para la vida. From Bach to Radiohead (Planeta), donde habla de algo que conoce desde que le parieron casi.                                      

El granadino se enamoró de la música de Rossini siendo muy joven y como consecuencia cuenta que “nací tenor, soy tenor y me moriré tenor”. Pero no solo escuchaba la música del compositor italiano. En su adolescencia ligaba al ritmo de las canciones de Perales, a pesar de que no se le diera demasiado bien. Confiesa en "Boulevard Magazine" de Radio Euskadi, que fue “un desgraciado en amores durante ese periodo”.

Con veinte años de historias y un millar de escenarios, el tenor decidió buscar la felicidad. Viajar por el mundo es el sueño de muchos. Pero, Zapata confiesa que “con la vida que llevaba de autoexigencia, de distancia de la familia y de exigencia ajena tan grande en la ópera no lo llevé bien y opté por hacer lo que me diera la felicidad y hacer lo que yo quería, no lo que los demás querían que yo hiciera”.

“Hansel y Gretel”, “Barbero de Sevilla”, son algunas de las muchas actuaciones que ha hecho el granadino. Algunos con vestuario un tanto peculiar, ya que, se ha vestido de abejorro, de bruja, de rata en Palermo y de cerdo en el Festival de Granada. A pesar de ello, “me lo he pasado muy bien” y añade que se volvería a vestir de bruja de “Hansel y Gretel”.

El granadino que cantó a Iron Maiden tiene claro que, “mi propósito de vida desde un año a esta parte es llevar la buena música a todas los lugares que pueda con Bach y con Mozart y estoy dispuesto a echarle todos los bemoles y todos los sostenidos que haga falta”.