Voluntarios Galdakao: "Limpiamos las toneladas de ceniza que se acumulan en los tejados"

Los miembros de la ONG Galdakaoko Boluntarioen Gizarte Elkartea son de los pocos que consiguen entrar en la zona de exclusión de La Palma y ven de primera mano lo que ocurre a las faldas del volcán.

Álvaro Saiz, voluntario de la asociación que trabaja en las labores de limpieza de las cenizas del volcán Cumbre Vieja de La Palma, ha relatado en "Boulevard" de Radio Euskadi en qué consiste su labor.

Para acceder a la zona de exclusión primero tienen que pasar un "control inmenso" en el que está prohibido el acceso a la prensa, e "incluso te quitan la cámara de fotos" ya que no se quieren divulgar las imágenes de la zona. "Es sobrecogedor y muy cruel" ha señalado Saiz. Los voluntarios de Galdakao se encuentran alojados a 3 kilómetros del volcán pero debido a que los accesos están cortados tardan hora y media en llegar al control de acceso.

Su labor consiste en quitar el peso de la ceniza de los tejados de las casa "que se puedan salvar". A veces acompañan a los vecinos que quieren entrar en sus hogares por lo que tienen que limpiar la zona de acceso y que "prácticamente hay casas con 3-4 metros de ceniza delante de su puerta". Son muchas las estructuras de la viviendas que ya han cedido ante el peso de la ceniza  y con la lluvia "se prevé que la ceniza se empape, doble el peso, y las estructuras se venzan". "Limpiamos las toneladas y toneladas de ceniza que se acumulan en el tejado" ha explicado el voluntario de Galdakao.

A veces los voluntarios vascos se unen a otras brigadas del ayuntamiento o vecinos y entre todos pueden limpiar una casa en unas 3 horas, "hacemos 2-3 casas diariamente", pero lo limpiado, vuelve a estar lleno de ceniza al cabo de 5 días. Saiz señala que "hace falta mucha ayuda, si en vez de 6 fuéramos 6000, esto se acabaría antes".

Galdakaoko Boluntarioen Gizarte Elkartea estará dos meses ayudando en la zona, en turnos de una semana cada grupo.