Cambio climático
Azti: "No se espera que en Euskadi para 2050 tengamos que abandonar instalaciones o zonas habitadas"
O.V. | EITB Media
Reportaje sobre los efectos del cambio climático en nuestra sociedad. En el caso de la manzana de sidra "el riego va a ser imprescindible dentro de poco", en el caso de las aves migratorias "pueden venir aves invasoras como las cotorras", y además, las lluvias van a ser torrenciales.
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"Boulevard" de Radio Euskadi visita los humedales de Salburua para ver cómo está afectando el cambio climático a las aves.
Gorka Belamendia, ornitólogo del Centro de Estudios Ambientales, ha explicado que en 1995, cuando se llevó a cabo el primer censo de cigüeñas invernantes en el Estado, solo había un ejemplar en La Rioja. 2 años después se detectó al primer ejemplar invernando en Álava y a día de hoy "hay más de 200 ejemplares invernando".
Muchas de las aves migratorias deciden quedarse en la CAV porque las temperaturas son más templadas que hace varios años y no les hace falta llegar hasta África para pasar el invierno. Además, teniendo en cuenta que las aves de los climas más fríos tampoco pasan a esta parte de los Pirineos, se ha pasado de los 50 000 ejemplares en todo el Estado en los años 80, a los 30 000 actuales.
Gorka Belamendia
Además se da el caso de que la golondrina que pasa el invierno en África vuelve por nuestros lares sobre febrero para poder criar, pero en febrero actualmente hay más heladas y borrascas, de las cuales no pueden escapar, y acaban muriendo. De aquí a 2050 "pueden venir aves comunes del Mediterráneo o invasoras como las cotorras".
Cerca de las tres cuartas partes de la población total de Euskadi reside a pocos Kilómetros de la costa. De cara a 2050 el nivel del mar podría subir entre 24 y 30 centímetros. Manuel González, técnico de AZTI, explica que el aspecto general del País Vasco "no va a variar sustancialmente debido a los acantilados costeros", pero las zonas más afectadas para 2050 por el aumento del nivel del mar serán "las playas, los estuarios", y las poblaciones que están cerca "se pueden ver afectadas puntualmente por inundaciones en situación de tormenta".
González destaca que los vascos "somos afortunados" porque no tenemos grandes extensiones de costas bajas, como por ejemplo, en las Islas del Índico, ni grandes deltas de ríos como en Asia. El técnico de AZTI considera que "no se espera que para 2050 tengamos que abandonar instalaciones o zonas habitadas" en el País Vasco.
"Boulevard" también ha visitado la cuna de la sidra guipuzcoana. Este año la denominación Euskal Sagardoa ha utilizado 6 millones de kilos de manzana de Gipuzkoa, es, decir, que el 60-70 % de la sidra de esta denominación se ha hecho con manzana local. Aitor Etxeandia, técnico de productores de sidra, que trabaja en la finca experimental que la Diputación de Gipuzkoa tiene en Villabona, donde se estudian las manzanas autóctonas y trabaja también para productores privados de dentro y fuera de Euskal Herria, ha explicado que "algunas variedades de manzana tendrían que desplazarse hacia latitudes más altas ya que no tienen suficientes horas de frio y tienen problemas para florecer". A esto hay que unirle el hecho de que llueve con menor frecuencia por lo que "el riego va a ser imprescindible dentro de poco".
Desde Atarrabia se ha hablado sobre qué acciones hay que tomar en los pueblos y ciudades antes los efectos de la emergencia climática. Para ello han hablado con la bióloga Itziar Almarcegui, quien ha insistido en que nos vamos a volver "mucho más vulnerables", ante hechos como las lluvias torrenciales, lo que va a derivar en más inundaciones en zonas habitadas, por lo que hay que trabajar en la prevención.
Itziar Almarcegui