Música
Análisis del auge de la cultura K-Pop entre nosotros
O.V. | EITB Media
Las redes sociales han tenido mucho que ver en el auge de la cultura coreana, que aunque lejana geográficamente está muy presente.
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Grupos del K-Pop coreano como BTS tienen "más de 60 millones de seguidores en Instagram y más de 44 millones en Twitter". Andrea Alfaro introduce en "Boulevard" de Radio Euskadi en los conceptos de la cultura K-Pop tan de moda en todo el mundo. El fenómeno fan de los BTS es más potente que el de los Beatles en su día y mueven mucho dinero y a mucha gente. El grupo musical BTS tienen más de 700 millones de reproducciones en You Tube en solo una de sus canciones y la revista Time los eligió como artista del año en 2020. Todo esto no es casual, detrás está el interés del Gobierno coreano de impulsar esta industria con la que poder llevar su cultura por todo el mundo. Es lo que llaman la diplomacia blanca. Desde el Gobierno se dieron cuenta del éxito de sus telenovelas en el mercado chino y las redes sociales e internet les permite ahora llegar a nuevos mercados: EEUU, Europa, Oriente Próximo, Latinoamérica,.. en lo que es un fenómeno imparable. El Gobierno participa en todo el proceso tanto de producción, como de distribución y de promoción. Ofrece, por ejemplo, ventajas fiscales a las películas y se encarga de que siempre haya una película coreana en cartelera.
Julia Rodríguez, doctora en Comunicación por la Universidad de Málaga, es autora de una tesis sobre la cultura coreana titulada 'El K-Pop y la interacción parasocial en España: el fenómeno fan en Instagram'. Julia Rodríguez, 28 años, ha reconocido estar "enamorada de esta cultura" desde 2011, tanto que ha acabado haciendo una tesis sobre este fenómeno musical. En las conclusiones de sus tesis destaca que "el producto tiene una calidad increíble, saben usar muy bien las redes sociales y la interacción parasocial", esto es, "la relación que tenemos con nuestros ídolos, que hace que los fans participen de esta experiencia".
En cuanto al feminismo en esta industria, la responsable de la tesis no ha dudado en afirmar que "se ven mujeres muy empoderadas que te abren los ojos hacia otro tipo de feminismo". Julia ha analizado el auge del K-Pop en España donde se calcula que en cuatro años, entre 2014 y 2018, el consumo de este tipo de música se ha incrementado casi un 720 %. Se calcula que en España hay cerca de 50 000 seguidores activos de este tipo de música y que un millar de alumnos están estudiado coreano en los colegios. La música es quizá el mayor emblema pero también se puede hablar del consumo de la cosmética, la comida, o lo último, el mundo de los videojuegos. "El universo K-Pop crea una ganas de conocer y saber que empiezas con una canción y acabas presentándote al examen de coreano".
Una de las partes oscuras de esta industria son los contratos de las compañías musicales con los jóvenes músicos, ya que están sujetos a la compañía durante 7 años, tienen que vivir todos juntos o incluso son penalizados si tienen pareja, aún así la doctora en Comunicación asegura que ha habido "un avance" en la mejoría de los derechos de los artistas. "Es como un OT a lo grande" ha señalado Andrea Alfaro, a lo cual Rodríguez ha añadido que el público coreano "tiene una imagen concreta de cómo tienen que ser los idols y los valores que tienen que tener".
Otra de las partes negativas de este negocio es que esta industria musical recluta a jóvenes, de entre los 12 y los 18 años, para formar estas bandas de música y son sometidos a tanta presión que se han dado muchos casos de suicidios por no poder soportarlo. El movimiento hater de las redes sociales también tiene mucho que ver en ello.