CONSERVATORIO DE BILBAO
"El 99% de nuestros alumnos son brillantes estudiantes en sus respectivos colegios e ikastolas"
EITB Media
En el Conservatorio Juan Crisóstomo de Arriaga tienen claro que a sus alumnos y alumnas estudiar música "les hace mejores". "Somos parte del sistema público de enseñanza y nuestra función es formar futuros profesionales y buenos aficionados y consumidores de música", explican.
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Ya siendo niño, Juan Crisóstomo de Arriaga (Bilbao, 1806 – París, 1826) reveló sus grandes dotes musicales. Pese a que su inesperada muerte nos privó de su arte de forma prematura, sus cualidades naturales, junto a la formación recibida tanto en España como en Francia, le convirtieron por derecho propio en uno de los compositores más destacados en la historia de la música española.
En 2020, el Conservatorio de Música que lleva su nombre alcanzó sus primeros cien años de vida; las celebraciones, sin embargo, tuvieron que ser aplazadas por la pandemia. Es ahora cuando, el conservatorio bilbaíno ha movilizado a toda la comunidad educativa para celebrarlo como se merece. Entrevistada en "Distrito Euskadi" su directora, Marian Aurrekoetxea, ha recordado que en marzo van a "llevar a cabo una serie de conciertos a cargo de profesores y de exalumnos, que son profesionales de primera línea"; recitales que irán acompañados de charlas y conferencias.
Con orgullo explica Aurrekoetxea que sus alumnos y alumnas "son unos superhéroes". Desde los 8 años no son pocos los niños y niñas que a la educación obligatoria suman la formación musical; con una carga horaria que va en aumento y el estudio en casa, clave "para mantener el nivel y seguir avanzando". La también directora de orquesta sostiene, no obstante, que estudiar música "les hace mejores": "El 99 % de nuestros alumnos son brillantes estudiantes en sus respectivos colegios e ikastolas".
"La música es un arte, pero sobre todo es una disciplina", señala a su vez el profesor Mario Lerena, por lo que "el trabajo y la constancia" es básico para avanzar, más allá de las cualidades naturales. "El arquetipo de niño o niña prodigio no es el perfil con el que trabajamos y, personalmente, no es algo que eche de menos. Somos parte del sistema público de enseñanza y nuestra función es formar futuros profesionales y buenos aficionados y consumidores de música. No estamos en los tiempos de Beethoven, que dicen que su padre le ataba al piano para que despuntase", apostilla Lerena.
Cuentan que el piano sigue siendo el instrumento estrella, seguido de flauta y guitarra, aunque el profesor Lerena insiste en que "se disfruta haciendo música con cualquier instrumento por igual".