Cerrar

MÚSICA SINFÓNICA CONTEMPORÁNEA

Teresa Catalán: "Si no educamos públicos no tendremos una sociedad que reclame todo tipo de músicas"

EITB Media

La compositora y catedrática navarra Teresa Catalán, galardonada con el Premio Eusko Ikaskuntza - Laboral Kutxa de Humanidades, Cultura, Artes y Ciencias Sociales, advierte que la desaparición "de las artes y de la filosofía de todas las enseñanzas es un problema muy grave".

Your browser doesn’t support HTML5 audio

Asombrada, emocionada y un poco abrumada. Así se siente la compositora navarra Teresa Catalán (Pamplona, 1951) tras ser galardonada con el Premio Eusko Ikaskuntza - LABORAL Kutxa de Humanidades, Cultura, Artes y Ciencias Sociales 202. "Nunca los esperas, porque un premio nunca es un fin y tampoco es el final", asevera.

"Me enamoré de un piano y a los seis años le dije a mi padre que quería ser músico", recuerda Catalán. No fue fácil en un tiempo en el que "las mujeres teníamos predestinado nuestro futuro y no se entendía la profesionalización, y menos a través de la música". Dentro de su amplio catálogo de anécdotas, la compositora navarra recuerda que también quiso tocar el violonchelo, pero su abuelo no le dejó: "Decía que una señorita no abre las piernas ni para tocar el chelo".

Cuenta con orgullo que se formó íntegramente en Pamplona, en el conservatorio que creó Fernando Remacha, su primer mentor; un lugar "extraordinario" donde coincidió con "maestros de la altura de Luis Morondo, Juan Eraso o Pilar Bayona", entre otros grandes de la música. A pesar de las dificultades fruto de los clichés de la época, de la falta de referentes femeninos y el "mundo hostil" que la recibió cuando decidió centrarse en la composición, Teresa Catalán siempre ha mantenido firme su compromiso con la música. Fue la primera mujer catedrática de composición en la historia de la educación musical en España y reconoce que, aunque hoy en día "no hay trabas para acceder a los estudios", la realidad es que "en las programaciones ordinarias no estamos todas las que somos, pero sí que están prácticamente todos los que son".

Mención aparte merece su labor académica. Aunque comenzó "por casualidad", pronto descubrió que "la síntesis que exige la docencia del conocimiento que has ido acumulando era verdaderamente una herramienta mágica para seguir aprendiendo y comunicando". Teresa Catalán es de las que considera que "en clase el que más aprende es el profesor" y agradece haber tenido la oportunidad, durante más de treinta años, de "compartir con gente joven y con miradas nuevas" ese conocimiento.

Además de formar a los futuros profesionales, también hay que pensar en el público. La compositora y catedrática navarra se muestra muy crítica con la desaparición "de las artes y de la filosofía de todas las enseñanzas" y advierte que "si solo reconocemos la música con una función de entretenimiento, y no educamos públicos, no tendremos una sociedad que reclame todo tipo de músicas".

Audios (1)