EDUCACIÓN
¿Es la educación inclusiva una realidad?
¿Cómo de cerca o lejos estamos de la inclusión real en el sistema educativo vasco? ¿En qué medida se responde hoy a la diversidad? ¿En qué grado son atendidas las diferencias y garantizados los apoyos y las ayudas específicas a quienes así lo requieren?
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El Departamento de Educación del Gobierno Vasco define la escuela inclusiva como aquella que "tiene que ofrecer a todos sus alumnos y alumnas las oportunidades educativas y las ayudas (curriculares, personales, materiales) necesarias que precisan para su progreso académico y personal, para el desarrollo de su autonomía. Desde el punto de vista de la "diversidad de capacidades", la escuela inclusiva "tiene que enriquecer sus propuestas, sus estrategias y sus contextos, para que el alumnado de todo tipo, desde el de altas capacidades al que presenta más dificultades, pueda desarrollarse al máximo, de manera que todo el alumnado alcance el máximo grado de desarrollo de sus capacidades".
¿Cómo de cerca o lejos estamos de la inclusión real en el sistema educativo vasco? ¿En qué medida se responde hoy a la diversidad? ¿En qué grado son atendidas las diferencias y garantizados los apoyos y las ayudas específicas a quienes así lo requieren? Son algunas de las preguntas a las que tratamos de dar respuesta junto al profesor de matemáticas Peio Salazar, la maestra emérita Arantza Conde, y el testimonio en primera persona del "divulgador de la diversidad funcional" e influencer Inazio Nieva, quien actualmente estudia un Grado Superior en Integración Social. Además de combatir el acoso escolar, Nieva defiende que es fundamental dotar al alumnado y al profesorado de formación y competencias que les permitan entender y atender las particularidades de las personas con diversidad funcional.
"La administración siempre ha andado un pasito por detrás", lamenta Arantza Conde. Hoy en día, a su juicio, "la etapa obligatoria está más controlada, pero a partir de ahí parece que no tienen derecho a secundarias no obligatorias, a universidades, másteres o postgrados". Considera Conde que "la educación pública" tiene que ponerse las pilas y dar ejemplo. "Un centro que tenga diversidad es mucho más rico", asevera Peio Salazar. Él pone el valor en el trabajo de las "PT y las educadoras, que en un sinsentido de este sistema, no se consideran docentes".