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Hágase la luz

Tengo una muñeca vestida de azul...

MARISA OZALLA | EITB MEDIA

Teresa Lafragua expone mil doscientas muñecas de su colección en el taller museo Santxotena de Artziniega. La muestra abarca desde ejemplares del siglo XIX hasta nuestros días

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Muñecas, muñecos y sus complementos: un cochecito de paseo, una casa de juguete, el armario con sus ropas...Muñecas de porcelana y de plástico. Peponas, Barbies y Nancys; Mariquita Pérez; Nenucos, Chochonas, la inolvidable Dulcita y un largo etcétera componen la exposición Despertar de una nostalgia del taller museo Santxotena. En ella, Teresa Lafragua muestra mil doscientas muñecas que representan sólo una parte de su colección. Muñecas que nos cuentan la historia y el momento social en el que fueron fabricadas. En definitiva, como señala Lafragua, "la evolución de las muñecas es un fiel reflejo de la evolución de la industria, los cambios sociales y la moda. El racismo también se observa en estos juguetes, puesto que las muñecas de color son muy difíciles de encontrar". ¡Busca la tuya!.

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