"Ser candidato al Eisner me ha supuesto un salto hacia delante enorme"

Si nos proponemos asistir a un salon del cómic sabemos que con un fin de semana tenemos bastante. Allí se reúnen autores, aficionados, editores y personas en general durante tres intensos días, se dan los premios, se trasnocha mucho y se madruga lo justo. Seguramente para evitarnos ese sofoco, el Salón del Cómic de Navarra, que va ya por su octava edición, se estructura en cinco fines de semana, este año entre el 25 de agosto y el 28 de septiembre.

En esos días, en fechas determinadas, los aficionados se pueden encontrar con Javier Olivares o Idoia Iribertegi, que ya han pasado, con Flavita Banana, Mauro Entrialgo, Calpurnio, Arantza Recio, Cels Piñol y Ernest Sala, entre otros autores. Y podrán visitar exposiciones que van de Fanhunter a Baztan entre viñetas,  pasando por El Jueves, uno de cuyos máximos representantes, Albert Monteys ha estado con nosotros. Pero para empezar a abordar la enorme inmensidad de este salón lo mejor ha sido hablar con su director Alberto Rodríguez.