Cuando respirar perjudica la salud y 2020: lo fabricado pesa más que los seres vivos

El informe La calidad del aire en Europa en 2020, publicado este mes por la Agencia Europea del Medio Ambiente expone que más de 400.000 personas mueren de forma prematura en los países europeos por causas ligadas a la contaminación del aire. El informe recoge la mejora que ha experimentado la calidad del aire en las ciudades en la última década, pero las cifras de mortalidad siguen siendo elevadas. La contaminación sigue siendo un problema de salud pública. El Año SEPAR por la calidad del aire, cambio climático y salud es una iniciativa de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica dedicada a la divulgación y sensibilización sobre los riesgos que entraña la contaminación  y  el deterioro del medio ambiente para la salud de las personas. Y más allá de las duras cifras de mortalidad asociada, estamos hablando también de la pérdida de la calidad de vida de todos los ciudadanos. Charlamos sobre esta campaña con Isabel Urrutia, médico en la unidad de asma y enfermedades de origen medioambiental  del servicio de neumología del hospital de Galdakao y coordinadora del área de medio ambiente de la Sociedad española de Neumología y Cirugía Torácica es, además,  coordinadora Año SEPAR 2020-2021 por la Calidad del Aire, Cambio Climático y Salud.

Un estudio realizado por investigadores del Instituto de Ciencias Weizmann y publicado en la revista Nature afirma que la masa de todos los materiales producidos por el ser humano ha aumentado hasta el punto de superar la masa de toda la vida en el planeta. Un producto relativamente moderno, el hormigón armado, es el mayor responsable del aumento de peso en el platillo de las cosas artificiales. El geólogo Antonio Aretxabala, que ha estudiado precisamente cómo es la vida útil del hormigón y  los factores que la reducen, nos ha hablado en numerosas ocasiones del concepto de antropoceno, el momento en el que la actividad humana deja una huella en la geología del planeta. Se trata de un estudio simbólico que viene decirnos cuánto pesa la huella del antrpoceno.