"Por una convivencia de la cultura con el descanso vecinal sin cargársela"

Son conciertos que se llevan a cabo en algunos  bares de la capital alavesa. Cristina Bereziartua dice que hay que buscar fórmulas que faciliten la convivencia. La colaboradora explica que siendo conciertos hasta las 10 de la noche, hay unos ratios -indicadores- bastante amplios para que todo el mundo pueda estar cómodo. Ella no es partidaria de lo que se está apostando, que es regular a dos conciertos máximos, porque se carga -comenta- una buena parte de la cultura de la ciudad. Y pone como ejemplo la tradición de hacer conciertos en el Casco Viejo, lo que, en su opinión, es una forma de promover y dar riqueza a la cultura.

Alain Coloma cree que todo hay que regularlo para poder convivir. Y destaca que hay una parte más técnica y otra más política en todo esto. Esa parte muy técnica es para él la interpretación de la ley de espectáculos del País Vasco que está más por la protección absoluta del derecho al descanso y otro tipo de licencias que pagan por los conciertos en pubs, discotecas... La parte más política es contar también con la realidad cultural de la ciudad. Él cree que se va a regular y que hay mucho más entendimiento que discrepancia. Y añade que la cultura no es un gasto nunca, es una inversión; da una identidad como sociedad y siempre es ganancia y no pérdida.

Bereziartua matiza que es una forma de dar a conocer a los pequeños grupos musicales que beneficia también a los hosteleros. La colaboradora opina que no hay que regularlo todo, que hay que regular cosas cuando realmente hay problemas. Para ella se pueden establecer marcos de diálogo con acuerdos entre vecinos, hosteleros y artistas sin necesidad de una normativa tan rígida que se cargue una parte de la cultura.

El periodista Ismael Diaz de Mendibil expone que acaba de terminar esa reunión y da paso a un representante de Orbain Kultur Elkartea, Iker Zubia, que dice que se han quedado a la espera de pedir al Gobierno Vasco que concrete esa normativa de 2015 en la que se basa el Ayuntamiento. El portavoz de la cultura local ve la reunión de manera positiva. Cristina Bereziartua se despide apostando por un acuerdo que permita hacer convivir la cultura con el descanso de los vecinos sin cargársela.