Exposición sobre Juan José Díaz de Espada en el Museo de Bellas Artes

Juan José Díaz de Espada nació en Arroiabe en 1.756 y ocupó desde 1.802 hasta su muerte en 1.832 el cargo de obispo de La Habana, una de las diócesis más ricas de la España colonial. Nacido en el seno de una vieja familia de la nobleza rural alavesa, apenas es conocido en su pueblo natal por no hablar del resto del territorio mientras que en La Habana casi 200 años después de la muerte aún se le recuerda. Considerado un obispo atípico pues era un ilustrado, durante su obispado en La Habana emprendió una reforma eclesiástica, sanitaria y pedagógica.

La historiadora Consolación Fernández Mellén, autora de un trabajo sobre Juan José Díaz de Espada, recuerda al personaje por el primer cementerio de América construido al aire libre y en un lugar alejado del centro de la población. La exposición del Museo de Bellas Artes gira en torno al retrato que hizo de Díaz de Espada el francés Juan Bautista Vermay, pintor oficial de Napoleón. Tras la derrota de Waterloo viajó a La Habana donde se relacionó con el alavés quién además le encargó obras para las iglesias de Arroiabe y Mendibil, tal y como explica la directora del Museo de Bellas Artes, Sara González de Aspuru.

El retrato de Díaz de Espada pertenece a los fondos del Museo desde 1.943. Tras su restauración y posterior estudio histórico-artístico, se pretende aportar una nueva visión de esta pintura fechada en 1.820.