Refugiados
385 personas pidieron asilo en Álava durante 2018
Rosabel Argote, de CEAR Álava, la Comisión de Ayuda al Refugiado, afirma que en lo que va de 2019 y en solo cinco meses se está igualando esta cifra
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385 personas pidieron asilo en Álava durante 2018. La Comisión de Ayuda al Refugiado, que ha constatado que en lo que va de 2019 y en solo cinco meses se está igualando esta cifra. La mayoría de los que llegan proceden de Venezuela, Colombia, Nicaragua y Honduras. La petición de asilo puede llevar años y en el 75 por ciento de los casos es denegada. Rosabel Argote, de CEAR Álava, ha contado en Radio Vitoria Gaur Magazine lo difícil que es y lo que cuesta iniciar este proceso.
A dos días de la celebración del Día Internacional de las Personas Refugiadas y en el 40 aniversario de CEAR, la organización ha presentado una nueva edición de su informe anual: “Las personas refugiadas en España y Europa”, un análisis sobre los datos de asilo globales, europeos y estatales. Más de 70 millones de personas desplazadas de manera forzada en todo el mundo. Cada vez llegan más personas, convivimos con ellas en nuestras ciudades, pueblos y barrios. Pero la carrera de obstáculos no finaliza al llegar a un lugar seguro. ¿Qué retos quedan por superar?. Argote señala que hay que facilitar el acceso al empadronamiento a todas las personas que solicitan protección internacional, independientemente de la documentación que dispongan. Acortar los tiempos de espera tanto para iniciar el procedimiento de solicitud de asilo como los de su resolución. Garantizar el acceso a la vivienda de las personas solicitantes de asilo y refugiadas. Además, es necesario garantizar su acceso al empleo, que además de ser un proceso difícil, está condicionado a la resolución de su solicitud de asilo. Cuando ésta es rechazada, automáticamente lo pierden.
Las personas que solicitan asilo tienen nombre, apellido, rostro y una vida. Akissi, procede de Costa de Marfil y solicita asilo. Vive en Vitoria-Gasteiz desde hace dos años. Ella nos cuenta en Radio Vitoria su difícil situación y la incertidumbre que tiene por no saber si tendrá que volver a su país de origen, de donde salió huyendo del maltrato al que le sometía el que entonces era su marido.