La lucha de los pensionistas hace una pausa para tomar impulso

Los pensionistas y jubilados alaveses auguran un otoño caliente con movilizaciones continuas y una marcha a Bruselas en autocaravanas.

Después del parón veraniego, volverán a concentrarse por mucho más que una pensión mínima de 1080 euros. También pedirán que se deroguen las reformas laborales, que la banca vuelva a ofrecer servicios en ventanilla y que se mejoren los cuidados en las residencias de mayores.

Seguirán en las calles, como lo han venido haciendo durante estos tres últimos años, y buscan el apoyo de los jóvenes porque el asunto también les concierne.