¿Qué pasos hay que dar para asegurar el relevo generacional en el sector primario y garantizar así su futuro?

Hablamos de un sector, el primario, con una media de edad alta entre los y las profesionales del campo, que en muchos casos se ven ahogados por la digitalización, el enorme papeleo y la excesiva burocracia a la que tienen que hacer frente. A ese problema hay que añadirle otro muy importante que tiene que ver directamente con la propia supervivencia de las explotaciones; los precios que se pagan por los productos que en muchos casos no llegan a cubrir los gastos de producción. De todo ello, de su presente y de su futuro charlamos con tres jóvenes alaveses que tienen muy claro que quieren dedicarse a esto.

Eder Sáez de Ocáriz, tiene 29 años y es agricultor en Etxabarri Urtupiña. Cultiva trigo, cebada, avena, guisantes y colza en la explotación familiar, y no se plantea otro futuro para él que no sea éste.

Mireia Córdoba tiene 25 años y es enóloga en la Bodega Familiar Córdoba Martínez en Lapuebla de Labarka. Ella también lo tiene muy claro, quiere dedicarse a la vitivinicultura a pesar de las dificultades, y ve su futuro entre viñas y depósitos.

David García de Albéniz, tiene 30 años, y es apicultor en  Albéniz a tiempo completo, y así espera que siga siendo en el futuro.