Frank Sinatra y Mia Farrow se divorciaron ¡por un corte de pelo!

Frank Sinatra y Mia Farrow vivieron un auténtico amor ciego cuando se casaron, hace exactamente medio siglo, el 19 de julio del 66.

Todos advirtieron a la pareja de que su matrimonio no podría funcionar, pero ellos no hicieron ni caso. Mia era 29 años más joven que Frank. Cuando se conocieron, ella tenía sólo 19 años, y él tenía ya 48. Lo más suave que le llamó la prensa de la época fue 'Asaltacunas', y esta boda no fue apoyada ni por los amigos de Frank.

Dean Martin confesó a su amigo Frank que no veía clara esa boda, porque en su bar tenía 'Whiskys más viejos que Mia Farrow'. Cuando Mia se cortó el pelo a lo garçon, la ex mujer de Frank Sinatra, Ava Gardner, tiró de ironía diciendo lo siguiente: 'Siempre supe que Frank acabaría acostándose con un chico'.

Lo que Frank no había previsto es que Ava y Mia ya se conocían. Y es que Ava Gardner, en su juventud, fue amante del padre de Mia Farrow: el director de cine John Farrow, que tenía casi la misma edad que Frank Sinatra. Y para complicar más las cosas, al casarse con el casi cincuentón Frank Sinatra, Mia Farrow se convirtió en la madrastra de las dos hijas de Frank y su primera esposa, pero ella era más joven que sus propias hijastras.

Mia Farrow tuvo que soportar además el odio de las fans de Frank Sinatra, hasta el punto de que una de ellas envió por correo a la pobre Mia un pastel envenenado con arsénico. Con tanta tensión en el matrimonio, Mia y Frank sólo aguantaron dos años casados. Hay quien dice que su ruptura fue culpa de Roman Polanski.

¿Cómo se conocieron?

En octubre del 64, Frank Sinatra estaba rodando El coronel Von Ryan en los platós de la Twentieth Century Fox. Y justo en el plató de al lado, la joven Mia Farrow, todavía con el pelo largo, grababa una teleserie de gran éxito llamada Peyton Place. Era cuestión de tiempo que Mia y Frank acabaran coincidiéndo en la cafetería de los estudios. Y allí, nada más verse y con toda naturalidad, Frank pidió a Mia que se sentaran juntos a desayunar.

Además de ser joven y tímida, Mia Farrow era virgen en aquel momento. Ella misma ha confesado que Frank Sinatra fue su primer amante, y que se acostaron el primer fin de semana después de aquel encuentro en la cafetería. Fue el comienzo de una pasional relación que tuvo su primera crisis precisamente el día en que Mia Farrow se cortó el pelo.

Un corte de pelo, decisiones propias y un divorcio

Ciertamente, fue el célebre peluquero Vidal Sassoon el que le cortó el pelo a Mia Farrow. Se lo cortó casi dos años antes del estreno de La semilla del diablo, precisamente para su boda con Frank Sinatra. Y eso a Frank no le gustó.

No le hizo gracia que su esposa luciera ese peinado tan moderno ante los 37 reporteros y las 17 cámaras de televisión que cubrieron la boda. En general, a Frank no le hacía gracia que Mia tomara decisiones por sí misma. Quería una esposa que estuviera 'en casa, en la cocina y con los niños'. Por eso, la segunda y última crisis de la pareja fue cuando Mia Farrow aceptó rodar La semilla del diablo a las órdenes de Roman Polanski.

Mia fue a Nueva York a rodar esta película, mientras Frank se quedaba en Los Ángeles. Y eso a Frank le sentó tan mal, que sin previo aviso envió a su abogado al plató de La semilla del diablo, para que entregase a Mia Farrow los papeles del divorcio. Fue una medida de presión para que Mia lo dejase todo y volviese con Frank. Y casi funciona, porque la actriz estuvo a punto de abandonar la película a mitad de rodaje.

Al final fue Roman Polanski el que convenció a Mia Farrow de que terminara la película y dejara a Frank. Y así, la actriz firmó los papeles del divorcio, poniendo punto final a su fugaz matrimonio con Frank Sinatra. Según los rumores, Frank y Mia volvieron a encontrarse años después concibiendo a Ronan Farrow: el hijo que tuvo Mia Farrow cuando estaba casada con Woody Allen. De hecho, Ronan Farrow se parece mucho a Frank Sinatra y muy poco a Woody Allen.