Reportaje
Puerto Rico, la isla del encanto
ETB
La reportera Carolina Calvo nos muestra los secretos y los lugares más especiales de la joya de las Antillas Mayores de la mano de cuatro vascos que actualmente residen allí.
La cuna de la salsa y el reggaetón no deja a nadie indiferente. Por ello, nos aventuramos entre los rincones de la isla del encanto para descubrir los secretos que la hacen tan especial. Situado entre el mar Caribe y el océano Atlántico, este archipiélago es una de las joyas de las Antillas mayores.
Un país en el que vayas donde vayas, el cielo azul, el sol, la naturaleza, la biodiversidad y las playas cristalinas, estarán presentes. Además de su variada gastronomía dónde las frutas tropicales como la piña y el aguacate son imprescindibles. Pero, el verdadero encanto de Puerto Rico lo encontramos en su gente. Carismáticos, hospitalarios y alegres, así son los puertorriqueños.
Por ello, no nos extraña que muchos vascos hayan echado raíces en la isla paradisíaca. Pero como no es lo mismo contarlo que vivirlo, vamos a conocer, en primera persona, la historia de los vascos que residen en Puerto Rico.
Israel, el amante empedernido
Israel tiene 43 años y es natural de Pamplona. El amor le llevó hasta la otra punta del mundo para vivir una nueva vida junto a su esposa. Junto a él, descubriremos la playa de Vacía Talega, uno de los lugares más visitados por los propios lugareños y por los turistas. Sus aguas cristalinas invitan a un baño relajante y dirigirnos a continuación, hacia la zona de Piñones para degustar unas alcapurrias y piononos.
Pero, no todo acaba ahí, puesto que el navarro es entrenador personal y trabaja dando clases de judo, por ello, conocemos junto a él la escuela de Judo del viejo San Juan. Finalmente, nos desplazamos junto a Israel y Ramaris hasta el lugar perfecto para bailar salsa cuando baja la temperatura diurna, la plazita de Santurce.
Gaspar, el gurú de la gastronomía vasca
Gaspar es un vasco muy puertorriqueño y lleva nada más y nada menos que 50 años residiendo en la isla del encanto. Es de Portugalete y ha pasado toda su vida entre fogones. Comenzó a trabajar a los 13 años en la hostelería en la localidad vizcaína, y a día de hoy, es embajador de la cocina de su tierra en su famoso restaurante La Bodega Vasca. Visitamos junto al gurú de la gastronomía, el tradicional mercado de Santurce, dónde encontramos las frutas y verduras más representativas de Puerto Rico.
Se nos presenta la oportunidad de conocer la casa más estrecha de América Latina, y cómo buen anfitrión, Gaspar nos lleva a conocer su casa; pero, para ello, cogeremos un ferry para cruzar al Barrio de Cataño.
Elena, de la banca a las playas más paradisíacas del mundo
Elena tiene 40 años y es natural de Vitoria-Gasteiz. Hace poco más de un año su vida cambió completamente y paso de trabajar en una oficina, a cuidar de su familia en un entorno paradisíaco y dedicarse a tiempo parcial a su gran pasión, la moda. Llegó al archipiélago siguiendo la estela de su marido que consiguió una buena oferta de trabajo allí. Por ello, dónde mejor para conocer a su familia que en el Cayo de Icacos, un archipiélago de islas casi vírgenes que forma parte de la Reserva Natural Cayos de la Cordillera. Un lugar realmente mágico.
Visitamos también la popular zona de Luquillo en la que tanto los lugareños como los turistas los visitan con la excusa de probar la comida callejera local a través del chinchorreo puertorriqueño, el equivalente al pintxo pote de Euskadi.
Eduardo, un enamorado de San Sebastián
Eduardo lleva 28 años en Puerto Rico y ha conseguido unir la capital guipuzcoana con el San Sebastián de la isla del encanto. Cruzó el oceáno por amor, tras conocer a su actual mujer en Donostia. En ese momento, ella debía volver a su terra natal y él lo dejó todo y se presento en Puerto Rico con el objetivo de seguir conociéndola. A partir de ahí, formaron una preciosa familia.
Comenzamos la visita en el pueblo en el que reside el donostiarra y el cual garda un gran vínculo con los vascos que así lo denominaron, San Sebastián de las Vegas y del Pepino. Descubrimos también, el conocido Castillo San Cristóbal, la fortificación más grande del Nuevo Mundo y Patrimonio de la Humanidad desde 1983. Finalmente, no dejamos pasar la oportunidad de explorar los secretos del Radiotelescopio de Arecibo, el segundo mayor del mundo y el lugar por el que se lanzó por primera vez un mensaje de radio al espacio exterior.