Montaña, tierra y mar, un viaje para disfrutar por la magnífica isla de Córcega con cuatro vascas

Córcega, también conocida por los griegos como "la sublime'', es la isla más montañosa del mediterráneo, tanto es así que dicen de ella que es una montaña en medio del mar.

Dejarse perder por su vasta y virgen vegetación, es algo imprescindible. Así como lo es, descubrir sus desiertos. Además de montaña y tierra, también hay mar, ya que cuenta con 1000 kilómetros de litoral y más de 200 playas.

Buena parte de su geografía forma parte del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La clave está en haberse decantado por un turismo sostenible, protegiendo dos tercios de su superficie como Parque Natural Regional.

Su capital Ajaccio es la ciudad donde nació el más famoso de los emperadores, el todopoderoso Napoleón Bonaparte.

El corso es un pueblo orgulloso y que reivindica una fuerte identidad propia. Por ello, viajaremos a Corte, para conocer la que fue capital de la Córcega independiente, y uno de sus lugares más auténticos.

Y qué decir de Bonifacio. Es la ciudad más visitada de la isla de Córcega, que atrae todos los años a miles de turistas del mundo entero.

Silvia Asín

Silvia es de Peralta, tiene 30 años y vive en Córcega desde hace algo más de un año. Esta navarra quería conocer otro país y otras culturas diferentes y, aprovechando las buenas oportunidades laborales que hay en Córcega, no lo dudó. Ella y su pareja, Arantza, de Barcelona, se mudaron a Corte, donde ambas trabajan como fisioterapeutas. Situada en el centro de la "isla de la Belleza", Corte nos muestra una Córcega auténtica y preservada.

Con Silvia conocemos la zona norte de la isla. Empezamos en el increíble desierto de Agriatte, un sitio natural de 16 000 hectáreas situado entre el mar y la montaña, uno de los mejores lugares para visitar durante tu itinerario en el norte de Córcega. El desierto de Agriates sigue siendo un territorio absolutamente salvaje que solo se puede recorrer en 4x4. Una experiencia única que termina en la playa de Saleccia, una playa virgen que nada tiene que envidiar a la costa caribeña.

Seguimos degustando gastronomía tradicional a base de carne de jabalí. Como sobremesa, "VxM" le da a Silvia una sorpresa: su txistu, instrumento que lleva tocando desde pequeña. Después, conocemos a un pastor de ovejas y cabras de la zona que nos enseñará la manera de vivir de muchos corsos que se dedican a la ganadería. Después, conocemos el hospital de Corte donde ella trabaja y el centro de la ciudad. Corte se considera la capital de la Córcega independiente, por eso, muestran con orgullo en su plaza principal la estatua de Pascal Paoli, considerado por el nacionalismo corso como "El Padre de la Patria". Después, vamos a lo alto de la ciudadela, desde donde se puede disfrutar de la mejor panorámica de la zona, y se aprecia la magnitud y belleza del valle de Restónica. Terminamos en una de las típicas tascas corsas, degustando patxaran casero y conociendo a su "cuadrilla" corsa.

Kuka Pino

Kuka es de Hondarribia, tiene 58 años y lleva desde los 3 en Córcega. Llegó a la isla porque su padre era estucador, y tenía un encargo en el museo Fesch. Todo su tiempo se lo dedica a su negocio, el Café M, un bistró en el centro de Ajaccio, la capital corsa, en el que pasa la mayor parte de su tiempo. Kuka siempre ha sido empresaria y, antes del café, regentaba una zapatería. Aunque lleva casi toda su vida en Córcega, Kuka echa mucho de menos a su madre, que vive en Hondarribia.

Conocemos su negocio, el Café M, el bistro que regenta desde hace 4 años y visitamos el mercado de la ciudad, que se celebra todas las mañanas y donde se encuentran los mejores productos locales: delicatessen, quesos regionales, vinos o mermeladas. Vemos La Place Foch, otro sitio turístico de Ajaccio que se refiere a Napoleón. Esta gran plaza está dominada por una gran estatua de Bonaparte con su famoso sombrero de candil. Nacido el 15 de agosto de 1769, Napoleón pasó parte de su infancia allí. Cerca se encuentra el puerto viejo, donde conocemos a un pescador y amigo de Kuka. La pareja de Kuka tiene un pequeño velero, que nos enseña y desde donde llamamos a su madre, Mariasun, que hace pocos meses volvió a vivir a Hondarribia.

Susana García